Como informábamos en días pasados en Ecuador, El pueblo ha salido a exigir comida, salud, trabajo, educación, respeto a los “derechos humanos”, libertad para los presos políticos, lucha frontal contra la corrupción. Una de las reivindicaciones principales de los luchadores es la rebaja considerable en el precio de los combustibles. El Estado ecuatoriano, en cabeza del banquero Guillermo Lasso, está actuando como una máquina de opresión contra las masas desarmadas. El terrorismo de Estado ejecutado por bandas paramilitares, el ejército, la fiscalía y la policía principalmente, está azotando al pueblo de diversas formas para tratar de apagar la poderosa lucha revolucionaria de las masas empobrecidas y superexplotadas de ese país.
El Estado ecuatoriano no ha cesado sus ataques contra el pueblo. Es de conocimiento público que el presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE), Leonidas Iza estuvo detenido y después sufrió un atentado con arma de fuego contra el vehículo en que se movilizaba, del cual salió ileso. La prensa que reporta las manifestaciones, los abusos policiales y los crímenes de Estado en las calles, ha sido el blanco de golpes y atropellos por parte de la represión estatal, y ni se diga de los comunicadores independientes, de las masas que con sus celulares graban y denuncian la brutal embestida de las fuerzas del orden burgués contra el pueblo desarmado. El gobierno del banquero Lasso también está censurando páginas web y diferentes cuentas en redes sociales para imponer limitaciones a la libertad de expresión.
De la represión no se han salvado ni las mujeres ni los menores de edad, estos últimos son ejemplo de lucha revolucionaria en algunos colegios en los que se han atrincherado para repeler las fuerzas reaccionarias y ser un bastión de apoyo importante para el paro. Las mujeres han sobresalido por su combatividad a la hora de encabezar los bloques que marchan desde diferentes lugares hacia el centro de Quito, con bastones, escudos y largos palos con los que se enfrentan cuerpo a cuerpo con los asesinos de la policía. Nada atemoriza a los luchadores del pueblo, ni siquiera los perdigones y bombas lacrimógenas lanzadas directamente al cuerpo y cabeza de los manifestantes, violando claramente la formalidad de las leyes que prohíben estas prácticas terroristas por parte de la policía.
Gran odio de clase despertó la toma de la Casa de la Cultura Ecuatoriana por parte de la policía y la Fiscalía, que conjuntamente allanaron el lugar bajo la protección de la declaratoria del Estado de Excepción ordenado por el terrorista presidente Lasso para garantizar la impunidad de sus perros de presa cuando cometan crímenes contra las masas; todo un montaje basado en una supuesta llamada en la que un anónimo denunció que supuestamente ese sitio estaba plagado de armamento y terroristas, lo que al final resultó ser mentira.
Medios independientes denuncian que brigadas fascistas con autos de lujo, dispararon balas de plomo al pueblo organizado, muy similares al accionar de la mal llamada “gente de bien” que operaron durante el pasado Paro Nacional en Colombia hace un año, como las bandas criminales que se organizaron en el sector de Ciudad Jardín en Cali, por lo que ese barrio de mercenarios recibió el apodo de “Ciudad balín”.
El pasado 19 de junio, en el sector de Collas, la policía y los militares arremetieron contra las masas luchadoras causando que 5 personas cayeran a una quebrada, y por ese hecho, una persona resultó muerta y dos se encuentran en grave estado de salud. En total, van tres manifestantes asesinados por el criminal Estado ecuatoriano, uno de ellos de forma muy similar a como el ESMAD asesinó a Dilan Cruz en Bogotá, cuando le incrustó una recalzada en su cráneo. Distintas caravanas de indígenas se han acercado desde varios puntos hacia Quito, ciudad en la que se han fundido con los obreros, estudiantes, jóvenes y experimentados luchadores que adoptaron el método del enfrentamiento cuerpo a cuerpo por medio de las Primeras Líneas, haciendo retroceder en muchos casos los piquetes policiales y del ejército burgués.
Las masas han organizado la recogida en diferentes puntos de insumos médicos (jeringuillas, guantes, mascarillas, hojas de bisturí, etc.) y otras donaciones (alimentos no perecederos, agua embotellada, botellones vacíos, jabón líquido, etc.), para sostener en el tiempo la valerosa lucha del pueblo ecuatoriano, confiando en sus propias fuerzas, porque una vez más queda demostrado que ¡Ni el Estado, ni los politiqueros! ¡Sólo el pueblo, salva al pueblo!
Los intentos de diálogo entre las partes han resultado infructuosos gracias a los incumplimientos de los negociadores del criminal gobierno de Lasso que sólo entiende el lenguaje de la violencia revolucionaria de los oprimidos y explotados del Ecuador. Igualmente, las masas deben estar vigilantes de las discusiones que tienen los representantes de las masas con los enemigos de clase y principalmente, que las decisiones que se tomen sean a referendo del pueblo que es el que está en las calles poniéndole el pecho a las balas de los asesinos que gobiernan a Ecuador.
Desde Colombia saludamos la valentía del pueblo ecuatoriano en su lucha contra el podrido Estado burgués en cabeza del reaccionario Guillermo Lasso. Saludamos los esfuerzos que realizan los comunistas revolucionarios en medio del conflicto, por difundir la política correcta entre las masas de que no basta con tumbar el gobierno asesino del banquero, sino, que es necesario avanzar hacia el derrocamiento por medio de la violencia revolucionaria del poder político, económico y militar de las clases reaccionarias ecuatorianas. Expresamos nuestra solidaridad internacionalista y ponemos a disposición del conflicto nuestro Portal Digital que ya ha publicado en las redes denuncias e informes sobre esa importante Huelga Política de Masas o Paro Nacional Indefinido.
Que los muertos del pueblo sean abono para la Revolución. La violencia reaccionaria será respondida con la violencia revolucionaria de las masas. Organizar ese estallido del pueblo para hacer avanzar la destrucción del capitalismo es la gran tarea que los revolucionarios del mundo tenemos por delante. De esas grandes confrontaciones entre las clases sociales antagónicas saldrán los combatientes que integrarán las filas del futuro Partido Comunista Revolucionario en cada país, bajo la guía del marxismo leninismo maoísmo, base de la futura y Nueva Internacional Comunista, centro mundial de dirección que la Revolución Proletaria Mundial exige de inmediato.
¡La sangre derramada, jamás será olvidada!
En Bogotá los distribuidores del periódico Revolución Obrera están citando a un mitin de solidaridad con el pueblo ecuatoriano:
