(Palabras de Azadi desde la India)
Tomado de Dazibao Rojo, 7 de julio 2022
Lo que está sucediendo las últimas semanas supera y con creces lo que ningún escritor o cineasta con imaginación hubiera podido escribir o filmar sin haber sido tachados de locos.
Nos estábamos acostumbrando de alguna manera a que la justicia, dependiendo del juez, siguiera las instrucciones del gobierno y en lugar aplicar la ley, aplicaran lo que conviniera al gobierno.
Todo ha empeorado de golpe con los últimos arrestos y los últimos acontecimientos y creedme, son ciertos aunque parezcan ciencia ficción.
Empezare con los arrestos:
Hay una página popular aquí que se llama AltNews que se dedica desde que nació a verificar noticias y desmontar falsedades. Uno de sus creadores/fundadores es Mohammed Zubair. Zubair siempre ha estado del lado de la realidad, siempre ha estado ahí cuando se le llamaba, cuando se le pedía que echara una mano por una u otra causa. De repente es arrestado por un tweet del año 2018. No solo dicho tweet no contenía material que pudiese molestar a nadie sino que la persona que lo denuncio a la policía por sentirse insultado ha borrado su cuenta de Twitter. Zubair sigue en custodia policial lo cual es inaudito pues si nos atenemos a la ley, la supuesta ofensa no significaría más de siete años de cárcel y no hay motivo para que no esté en libertad hasta la celebración del juicio pero… y aquí radica la realidad de su detención, Zubair es de origen musulmán y ya sabemos, tristemente lo sabemos, que ahora los musulmanes son el objeto de caza favorito del gobierno aparte de los maoístas porque cazar maoístas en las zonas urbanas es más difícil que cazar musulmanes. Y Zubair siempre ha sido muy crítico con el gobierno actual y la figura de Modi desde que fue ministro jefe de Gujarat.
Las otras detenciones que han causado estupor han sido las de Teesta y Sreekumar. Los dos junto con Sanjiv Bhatt llevan años luchando para que se haga justicia con las víctimas de los disturbios de Gujarat 2002. Por si no lo recordáis o alguien no lo sabe, Modi era en 2002 el ministro jefe de estado de Gujarat. Durante su mandato se quemó un tren en el que murieron 59 peregrinos incluidos mujeres y niños. Rápidamente el gobierno de Modi dijo que había sido un ataque de los musulmanes y dio vía libre a los ciudadanos para que persiguieran, cazaran musulmanes pues debían pagar por el tren quemado. Según cifras oficiales, los disturbios terminaron con 1.044 muertos, 223 desaparecidos y 2.500 heridos. De los muertos, 790 eran musulmanes y 254 hindúes. Otros informes hablan de más de 2.000 muertos. Se informó de muchos asesinatos brutales y violaciones, así como saqueos y destrucción generalizados de propiedades. La violencia ejercida la policía y los funcionarios del gobierno no tuvo parangón pues tenían listas con los nombres de musulmanes destacados, así como de sus propiedades que les fueron facilitadas por el gobierno de Modi. Entre los asesinados hubo incluso políticos del partido del Congreso. Años más tarde, los técnicos forenses confirmaron que el tren había sido quemado desde el interior y que las puertas estaban bloqueadas. ¿A quién le convenía semejante montaje? ¿Quién se beneficiaba? Ahora sabemos que MoShah es experto en trabajos internos pues así como inocentes fueron quemados vivos en el ataque de Godhra, en Pulwama las víctimas colaterales necesarias fueron soldados para crear el ambiente propicio contra los musulmanes no solo en Kashmir sino en todo el país.
Y así, conociendo los antecedentes, volvemos a esta semana en la que la corte suprema emitió un veredicto eximiendo a Modi de cualquier tipo de responsabilidad en los disturbios. Teesta es abogada y lleva años luchando por las víctimas de los disturbios.
Sreekumar (foto central) fue Director General de la Policía y ha declarado contra Modi y ahora por fin le han hecho pagar el precio al igual que Teesta, y Sanjiv (foto de la izquierda) está en la cárcel desde 2019 condenado a cadena perpetua por un caso fabricado contra él pues siendo oficial de policía fue el primero en poner un caso contra Modi como responsable de los disturbios. Tras poner el caso, primero fue apartado de su puesto, luego de repente empezaron a aparecer casos contra él como responsable de la muerte de un prisionero en custodia policial. Incluso los testigos a favor de Sanjiv fueron obligados a retractarse para dejar claro a la luz pública que Sanjiv tenía que ser culpable y para acabar de rizar el rizo, fue imputado en un caso de drogas del año 1996 acusándole de haber puesto drogas en una habitación de hotel para capturar a un abogado. Nada ha podido ser probado en su contra y es bien sabido que todo fue orquestado por la camarilla de Modi contra él por haber tenido la desfachatez de acusarle de estar detrás de los disturbios. No solo su juicio fue una farsa como lo fue el del profesor Saibaba sino que está quedando claro que la justicia no solo no es independiente sino que varios de sus miembros sirven fielmente a su amo.
Y para terminar, vais a flipar pero ha sucedido también esta semana. Otras veces os he mencionado como la población musulmana pese a ser una minoría en el país (alrededor de un 14%) están siendo objeto de caza como destructores de la India que MoShah quiere. Hasta ahora se habían limitado a arrestar estudiantes como Sharjeel Iman o Umar Khalid o Fatima Gulfhisa, o periodistas como Aasif Sultan – quien está en la cárcel desde Agosto de 2018 y cuyo delito es ser kashmiri – Sidique Kappan, o Zubair ahora pero el último acto maquiavélico de este gobierno es de libro de texto para el futuro.
La semana pasada, un sencillo sastre de religión hindú y por lo visto seguidor de Nupur Sharma (la bocazas del gobierno que desató una guerra mediática por insultar a Mahoma con la misma tranquilidad que quien oye llover) fue decapitado en directo por dos hombres musulmanes que no solo lo grabaron y difundieron en vivo y en directo, sino que amenazaron con hacerle lo mismo a Modi. Os podéis imaginar la tormenta social que se desató pero que con la misma ferocidad con la que apareció… milagrosamente ha desaparecido al saberse que dichos musulmanes era miembros del BJP. ¡¡¡Sí!!! No me lo invento. Es la realidad y os adjunto la prueba
¿No nos recuerda a las tácticas usadas por Hitler para iniciar la segunda guerra mundial?
Y no es el primer caso en que musulmanes afiliados al partido han tenido relación con un acto barbárico.
Se están convirtiendo en el “arma” de moda en el BJP. Usar musulmanes contra hindúes siendo miembros del partido. ¡Vaya ironía!
Todas las voces furiosas que clamaban venganza tras la decapitación del pobre e inocente sastre cuyo crimen fue creerse las palabras de la bocazas del gobierno, ahora… os quedaríais parados de cuan silenciosas se han vuelto, incluso se puede oír volar a las moscas y mientras sucedía todo esto Modi se unía a la cumbre del G7 para proteger la libertad de expresión.
Los tentáculos de este gobierno empiezan a ser inimaginables en su extensión de ahí la peligrosidad de la Operación Samadhan-Prahar 3. Con dinero están consiguiendo lo que el gobierno anterior no consiguió con la violencia. India necesita ayuda y ayuda urgente para combatir un fascismo que es ya una realidad palpable día a día.
Y os dejo con las ultimas reflexiones escritas por Arundhati Roy.
«En las dos elecciones generales de 2014 y 2019, el BJP ha demostrado de forma convincente que no necesita el voto de los 200 millones de musulmanes de la India para obtener la mayoría en el Parlamento en las elecciones nacionales. Así que, en efecto, estamos ante una especie de privación de derechos. Esto puede tener corolarios peligrosos. Porque una vez que se te priva del derecho de voto, ya no importas. Te vuelves intrascendente. Se puede utilizar y abusar de ti. Esto es lo que estamos presenciando ahora. Incluso después de que altos cargos del BJP insultaran públicamente todo lo que los musulmanes consideran más sagrado, el partido no perdió el apoyo ni recibió críticas significativas de su base fundamental de apoyo.
Ha habido importantes protestas de los musulmanes en respuesta a estos insultos. Las protestas son comprensibles, porque el incidente se produjo después de tanta violencia y brutalidad. Excepto que, como sucede inevitablemente, algunos de los manifestantes pidieron una ley de blasfemia, que el BJP probablemente estaría más que feliz de aprobar, porque entonces casi todos los comentarios sobre el nacionalismo hindú también podrían ser criminalizados bajo esa ley. De este modo, se silenciarían todas las críticas y se impediría todo comentario inteligente sobre el pozo político e ideológico en el que está cayendo la India. Otros manifestantes individuales, uno de ellos de un importante partido político, All India Majlis-E-Ittehadul Muslimeen (AIMIM), pidieron la horca y otros pidieron la decapitación, todo lo cual sirve para confirmar todos los estereotipos sobre los musulmanes que la derecha hindú se esfuerza tanto en perpetuar. Al otro lado de los altos muros de los insultos y las amenazas de muerte de uno y otro bando, no parece posible ninguna conversación.
La polarización que siguió a las protestas no ha hecho más que aumentar el apoyo al BJP. La portavoz del BJP que profirió el insulto ha sido suspendida del partido, pero ha sido abrazada abiertamente por sus miembros. Su futuro político parece brillante.
Hoy en día, en la India, estamos viviendo el equivalente político de una política de tierra quemada. Todo, todas las instituciones que han tardado años en construirse, están siendo destruidas. Es aturdidor. Una nueva generación de jóvenes crecerá con el cerebro totalmente lavado, sin conexión con la historia o la complejidad cultural de su país. El régimen, con la ayuda de los medios de comunicación, que cuentan con unos 400 canales de televisión e innumerables sitios web y periódicos, mantiene un ritmo continuo de fanatismo y odio, alimentado por los personajes de la estirpe del odio a ambos lados de la división hindú-musulmana.
Dentro de los círculos de la derecha hindú hay una nueva y agresiva extrema derecha que muestra una inquietud palpable que el gobierno de Modi tiene cada vez más dificultades para controlar, porque son la base de apoyo principal del BJP. En las redes sociales, ya es habitual encontrar llamamientos abiertos al genocidio de los musulmanes. Hemos llegado a un punto de no retorno. Lo que tenemos que pensar los que nos oponemos a esto, y especialmente la comunidad musulmana de la India, es cómo podemos sobrevivir a esto. ¿Cómo podemos resistirlo? Son preguntas difíciles de responder, porque hoy en día en la India incluso la propia resistencia, por muy pacífica que sea, es considerada un crimen atroz, casi parecido a un acto de terrorismo».
Arundhati escribió estas palabras antes de saberse que los decapitadores eran miembros del BJP
¡¡¡Seguimos en la lucha camarada!!!
¡¡¡Lal Salaam!!!