¡Avanzar en la Preparación del Paro General Indefinido!
Ante las crisis económicas que descomponen y sacuden el sistema capitalista como si fuera un barco a la deriva en el embravecido mar de la anárquica superproducción, los dueños del capital siempre acuden al recurso de rebajar costos de producción. Así lo han hecho durante todo el año, los explotadores chupasangre amangualados con el terrorista régimen de Duque y escudados en la pandemia.
Rebajar costos de producción no es producir menos, sino principalmente reducir el costo de la mano de obra: rebaja de salarios, despidos masivos, supresión de contratos indefinidos e imposición por ley de nuevas formas de contratación con menos salario y sin prestaciones sociales. Este ha sido el pan de cada día en este tiempo de pandemia.
Rebaja de salarios no solo en su valor nominal como parte de las nuevas modalidades de contrato laboral y de chantaje aprovechando la presión de 5 millones de desempleados, sino ante todo rebajando el valor real del salario en la superexplotación derivada de alargar la jornada de trabajo e intensificar el ritmo o velocidad del mismo, tanto presencialmente en la fábrica como virtualmente en las casas.
Como si fuera poca la continua rebaja de salarios, los capitalistas ávidos de más ganancias, preparan la legalización de una nueva rebaja anual en la tradicional farsa de negociación del salario mínimo.
A pesar de haber cargado los costos de la crisis a los trabajadores, los representantes de los gremios empresariales tienen el descaro de chillar por su situación económica, y recurren a las mentiras de todos los años sobre los “peligros” si suben los salarios.
Por su parte, los jefes vende-obreros de las Centrales mientras en la práctica impiden la preparación del Paro General Indefinido, sí muy comedidos se alistan para sentarse a manteles con los enemigos del pueblo a concertar —léase a firmar su traición a la clase obrera— anunciando el pedido de un miserable 13% en la farsa del salario mínimo.
De inmediato el presidente títere de los capitalistas, pide “mesura” ante tan “exagerada” exigencia que “pone en peligro” la recuperación económica.
¡Es necesario rechazar la farsante concertación del salario mínimo! A denunciar este infame concierto de secuaces de la explotación asalariada, donde todos hablan en nombre de los trabajadores pero ninguno los representa realmente, donde todos mientras dicen beneficiar a los asalariados les entierran por la espalda el puñal de la superexplotación. Obreros activos, obreros despedidos, obreros desempleados, trabajadores que ni siquiera reciben el mísero salario mínimo, las víctimas del subempleo por horas o por tarea, los condenados a vivir del informal rebusque diario… ¡Todos a la calle a exigir UN ALZA GENERAL DE SALARIOS! ¡Todos a organizarse en comités y asambleas pro paro! ¡Todos a preparar con decisión el Paro General Indefinido que exija por la fuerza y la presión de la huelga un aumento real del salario!
¡No a la concertación obrero-patronal! ¡Viva la lucha obrera contra los explotadores!