Moneditas que acrecientan la indignación popular

Moneditas que acrecientan la indignación popula

El gobierno de Iván Duque firmó un contrato por $41.917.750 para elaborar 1409 moneditas de bronce con un baño de oro de 24 kilates, que serán usadas como recordatorios de su mandato. Cada moneda tendrá el precio de $25.000.

El títere que puso la mafia a gobernar Colombia en el presente período, está saliendo bastante costoso. No se debe olvidar la compra de camionetas blindadas, la compra del nuevo helicóptero presidencial… y ahora ¡las moneditas! Todo en medio de la pandemia del Covid-19 que agravó terriblemente la crisis económica y social, descargada sobre millones de obreros, campesinos y pequeños propietarios del campo y la ciudad que sufren diariamente. ¡Definitivamente se necesita un Gobierno Obrero y Campesino que dirija la sociedad basado en las necesidades de las masas y no en la ganancia y costosa burocracia burguesa!

Monedas, autorización de contrato

El presidente títere, puede estar tranquilo porque no será olvidado y no necesita la compra de estas monedas para permanecer en la memoria del pueblo, que lo recordará como el presidente títere del capo de la mafia Álvaro Uribe Vélez, vendido por la ralea mafiosa y paramilitar como el más joven. En efecto el que asesinó, despareció, mutiló y violó más jóvenes en medio del Paro Nacional y de uno de los más grandes levantamientos populares; el que aumentó las masacres, el asesinato de dirigentes populares y desmovilizados; el presidente idiota guitarrista, futbolista, bailarín… el del “así lo querí”; el que nombraron haciendo el fraude más evidente con los tarjetones electorales tachonados; el presidente que le quitó hasta la formalidad a la supuesta independencia que tienen los llamados organismos de control (Fiscalía, Defensoría, Procuraduría…) al nombrar a todos los amigotes de la mafia en esas instituciones… el títere será recordado sin necesidad de mandar a hacer las moneditas.

El títere dirá, “¡no soy monedita de oro para caerle bien a todos!”, mientras tranquilamente se come unas moneditas de plátano y lee en semana.com (dirigida por la periodista prepago del régimen Vicky Dávila) cómo le limpia con cinismo la cara cuando dice que “sobre la política de austeridad liderada por el jefe de Estado, hace varios días se conoció que se avanza en el rediseño institucional de la Presidencia de la República”. ¿Cuál “política de austeridad”? ¿La del avión, la de las camionetas, la de las moneditas…?

Mientras tanto, el pueblo a lo suyo. A seguir preparándose para gobernar, pero no como producto del camino electorero en el cual llueven monedas –y cheques y billetes y contratos por montón– a los elegidos; o mejor, a los nombrados por las diferentes facciones de la burguesía y los terratenientes, que no dudan en poner en esos cargos de dirección del Estado burgués terrateniente, a aquellos que les garanticen multiplicar los millones de monedas que tienen acumuladas en sus cuentas bancarias. Las elecciones de la democracia burguesa son una farsa, en las que el que escruta o cuenta los votos, es el que elige, así como lo hizo el papá del títere Duque, Iván Duque Escobar, quien fue Registrador Nacional hasta agosto 24 de 2002, es decir, el que “contó” los votos que le dieron al carnicero Uribe Vélez, la presidencia en su primer mandato.

¡El pueblo debe prepararse para gobernar! Porque la situación es insoportable y para ello necesita forjar la unidad de las masas populares que están contra el régimen asesino, organizando las Asambleas Populares que discutan y aprueben llevar a la práctica el Programa Inmediato que no solo tumbe al régimen, con el paro de la producción y el combate en las calles, sino que prepare las fuerzas y las condiciones para avanzar a la Revolución Socialista en Colombia, mediante la insurrección popular que destruya el viejo Estado de los explotadores, para construir el nuevo Estado de obreros y campesinos, la verdadera democracia del pueblo armado, que acabe con la burocracia, la corrupción y los privilegios de los funcionarios, así como con la explotación.

¡Las moneditas de Duque acrecientan la indignación popular y le van a costar un ojo de la cara al sistema de oprobio que defiende!

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