Manuel Sarmiento, concejal del Polo en Bogotá, le hizo campaña política a Claudia López para que resultara nombrada como alcalde y hoy dicho partido es parte del gobierno de la capital. Sarmiento se dirigió a los obreros de distintas ramas de la producción entre otros sectores del pueblo, llamándolos a votar por la candidata del Partido Verde. Una de las promesas de campaña de la hoy alcalde, fue no construir Transmilenio sobre la Avenida Carrera 68, una arteria vial y comercial de la capital.
Sin embargo, como buena politiquera reformista, rompió dicha promesa electoral y permitió que continuara la licitación de esa troncal de Transmilenio, ante lo cual, los comerciantes de la zona salieron a protestar, y Manuel Sarmiento, el escudero en campaña de Claudia López, el que hizo que un sector de la clase obrera en Bogotá saliera a respaldarla en las urnas, el amigo de Jorge Robledo del MOIR que también respaldó a la hoy alcalde, también salió a protestar y a bloquear la Avenida 68. Pero paso seguido, salió a defenderla y a elogiar su gobierno por haber retirado ante la CAR la solicitud de intervención de la reserva Thomas Van der Hammen.
El concejal amarillo Manuel Sarmiento de los afectos del MOIR, engaña a los obreros con su politiquería y hace mil maromas para quedar bien con todo el mundo. Esa es la política concertadora y conciliadora con los enemigos del pueblo que reina en los partidos pequeño burgueses apelmazados en el Polo Democrático, cuyos jefes posan ante los obreros de radicales, pero al final son mansas ovejas con el capital que quiebra a los pequeños y medianos comerciantes, que promueve medios de transporte contaminantes, costosos e inseguros para el pueblo como lo es Transmilenio, todo en beneficio del gran capital concentrado en los monopolios.
Los obreros no deben confiar en estos supuestos salvadores y los incitan a esperanzarse en la democracia burguesa para solucionar sus problemas causados por el capitalismo. Los politiqueros del tipo de Manuel Sarmiento son demagogos que usan el engaño para pescar votos entre los obreros porque de antemano saben que desde el establo parlamentario como el concejo por ejemplo, no van a poder solucionar los problemas del pueblo. En Bogotá los obreros y trabajadores en general, fueron engañados por concejales y politiqueros polistas como Manuel Sarmiento, que les vendieron la candidatura de la señora López como si ella fuera a traer el progreso y bienestar que no tienen las familias del pueblo. Pero todo lo contrario: el gobierno en la alcaldía de López es afín a los intereses de la burguesía parásita que encuentra en ella un medio para realizar sus ganancias, mientras los explotados y oprimidos reciben opresión violenta por parte del ESMAD cuando sale a protestar y se le aplica el tal «protocolo», o son quebrados económicamente para favorecer a los monopolistas del Transmilenio.
El llamado es a persistir en la lucha directa, organizada y de amplios sectores del pueblo en contra del Estado de los explotadores representado en la capital en la títere de los capitalistas como lo es el gobierno de Claudia López, que encontró en los jefes del MOIR a los mejores apagafuegos de la lucha del pueblo.