Con la nueva alcaldía del señor Alejandro Éder, una parte de la comunidad caleña esperaba soluciones, ya que Cali viene de mal en peor en el aspecto económico social debido a que poco o nada le importa a la burguesía local solucionar los problemas del pueblo trabajador, y ello se refleja en las pésimas condiciones de los trabajadores, de la juventud, de los niños y de los viejos.
Los grandes problemas como la falta de empleo, una mejor educación y acceso a los colegios públicos llevó a que el gremio del magisterio realizara una protesta en el Concejo el 22 de enero; la semana pasada se presentó una asonada por las medidas de choque que ha venido implementando este alcalde al militarizar la zonas, donde hacen los operativos de tránsito, situación que llevo a que la comunidad del sur-oriente del barrio Manuela Beltrán se levantara y sacara con garrotes a la policía de tránsito, al ESMAD y al mismo ejército.
El alcalde Eder ha actuado de manera rastrera e hipócrita porque en campaña no habló de militarización y tampoco aceptó el apoyo del paraco Andrés Escobar, pero a la chita callando está aplicando el terrorismo de Estado de manera frontal contra el pueblo trabajador.
Y para rematar con estas medidas de choque, este señor dijo que no quedó presupuesto para los comedores comunitarios y que debido al déficit de los 762 comedores que estaban funcionando el año anterior y de la noche a la mañana suprimió 400, echándole la culpa a la alcaldía anterior y sobre todo diciendo mentiras y culpas contra los gestores de los comedores comunitarios de que se robaban los mercados, situación que ha indignado a la comunidad, ya que esto no es cierto.
Por ello los gestores exigieron ayer 24 de enero en el plantón realizado frente a la plazoleta del Consejo, que tanto el alcalde, como la funcionaria de Bienestar Social se retractaran de dichas mentiras. La jornada, que contó con la participación de los usuarios de los comedores, niños y jóvenes, y en la que se hicieron bloqueos intermitentes frente al Centro Administrativo Municipal y la plazoleta Jairo Valera funcionó. Informamos que, gracias a la actividad realizada, hoy el alcalde se retractó en la medida de suprimir los 400 comedores manifestando que se había presentando un “mal entendido”. ¡Luchar paga!
Desde el Portal Revolución Obrera reiteramos la necesidad de la lucha directa, de la unidad del pueblo de los diferentes gremios como los de la industria, el magisterio, los transportadores chaneros, los recicladores, vendedores ambulantes… para conquistar sus justas reivindicaciones. El pueblo luchador caleño se debe unir y organizar retomando las enseñanzas del estallido social del 2021, saliendo nuevamente a las calles para hacer valer sus derechos, ya que durante las campañas todos los alcaldes prometen muchas cosas, que no cumplen.
De ahí que es una necesidad que el pueblo se una, se organice y se movilice, luchando de manera planificada en torno a la Plataforma de Lucha para preparar las Asambleas Populares que exija a la alcaldía solución inmediata a los diferentes problemas.
Solo el pueblo salva al pueblo ya que ni el podrido Estado burgués, ni los politiqueros resuelven la problemática del pueblo.
Adelante con la preparación de las Asambleas Populares.
Reportero de Cali
Enero 25 2024