Usuarios de la EPS Caprecom en Bogotá y trabajadores del Hospital Centro Oriente se movilizan

En la jornada por salvar los hospitales públicos convocada a nivel nacional por redes sociales, los usuarios de la EPS Caprecom en Bogotá y trabajadores del Hospital Centro Oriente, acompañados de otros activistas, marcharon por la carrera séptima hasta el Ministerio de Salud.

Era una fría mañana y la convocatoria no alcanzó a aglomerar la gente esperada, pero rebeldía e indignación no faltó entre los manifestantes presentes, exacerbados por la situación de no pago de las EPS’s a los hospitales y por el mal servicio de salud pública.

Los trabajadores del Hospital en mención dicen que tienen los pagos retrasados porque son los últimos en recibir su salario, cuando son los primeros en ofrecer y garantizar el servicio. Los altos funcionarios de los hospitales son los primeros en participar en la corrupción pública, pero piden a los trabajadores que se resignen a ver retrasado y cada vez más poco su salario, cuando no es su culpa esta situación. La excusa es la enorme deuda que no pagan las EPS’s a los centros de salud.

Los capitalistas primero desprestigiaron las entidades públicas de salud y luego montaron la competencia de las privadas, para posteriormente entregar el monopolio del servicio a éstas y permitir que se robaran el dinero destinado a cubrir este servicio básico. Los trabajadores y usuarios saben esto, como comprenden que el Ministro no da la cara a los luchadores, porque está puesto por los capitalistas de este país para entregarles una jugosa empresa que se fortalece con la superexplotación de los trabajadores y la discriminación de los usuarios que no tienen dinero, pero que requieren el tratamiento para sus enfermedades, muchas de las cuales es el mismo sistema el que las crea y desarrolla.

Por lo anterior, sabiendo que es la corrupción capitalista la responsable principal del grave desfalco de la salud pública, enterados de la indolencia del Ministro Gaviria y del gobierno Santos, que a costa de los muertos y enfermos que sea quieren finiquitar este negocio y así sacar su tajada; de que el propósito de quitar a los privados la competencia de los hospitales públicos provocará más sufrimientos para el pueblo enfermo, ancianos con oxígeno en mano, salieron a marchar dando ejemplo de tenacidad a los más jóvenes.

La jornada fue próspera, y aunque el Ministerio de Salud sigue firme en sus propósitos privatizadores, el odio del pueblo se concentra y apunta a la guarida de los representantes de los capitalistas, quienes tarde que temprano deberán ceder a las reivindicaciones de trabajadores y usuarios, so pena de enfrentar una poderosa Huelga Política de Masas a nivel nacional que reclame esta y otras reivindicaciones exigidas por los oprimidos y explotados al Estado de los explotadores.

Ya las masas saben que este sistema tiene un corazón de piedra; es cada vez más claro que el Estado de bienestar que fundó la salud pública en países oprimidos como Colombia, fue obligado por la competencia con el bloque socialista para contener el avance de la Revolución Proletaria Mundial, pero ya que no existe el ejemplo vivo del camino de expropiar a los expropiadores, como hicieron los obreros y campesinos en Rusia y en China, los capitalistas dan por hecho que pueden volver a lo de siempre, que es sacudir los bolsillos del pueblo hasta el último centavo y chantajearlo con la salud. ¿El pueblo se dejará sabiendo que es el que todo lo produce y es el capitalismo con todos sus males el causante de la grave situación de salud pública? ¡Seguro que no!

Los bandos son claros: trabajadores y usuarios contra el Estado y los capitalistas. Los obreros y campesinos por su parte deben continuar adelante con su lucha de clases, tanto para conseguir sus reivindicaciones inmediatas, como para lograr los objetivos máximos de la clase obrera, que éstos solo se pueden materializar mediante la conquista del poder político, el poder estatal construido sobre las ruinas del Estado burgués actual, al que debe destruirse violentamente. No hay otra salida.

Corresponsal de Bogotá.

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