Sri Lanka es un país insular ubicado al sur de la India en el Océano Índico, con una población de aproximadamente 22 millones de habitantes y compuesto por varias nacionalidades, sobre todo la mayoría cingaleses y una minoría Tamil.
Más de 1000 organizaciones, en su mayoría sindicales, convocaron un paro nacional a comienzo de mayo como respuesta a la grave situación de hambre que vive la mayoría de la población. El 6 de mayo fue un día clave en las jornadas de lucha; el transporte, los servicios públicos, la mayoría de empresas privadas, las escuelas, colegios y universidades, toda la economía del país se detuvo en una jornada que los medios de comunicación reportaron como la más grande de Sri Lanka en los últimos años.
Así lo reportan los camaradas de la Liga Revolucionaria Maoísta de Sri
Lankahttps://liberationbase.wordpress.com/
Ha comenzado una serie de protestas en toda la isla contra el régimen dictatorial, corrupto y fascista de Rajapaksa. La economía de Sri Lanka se encuentra actualmente en un profundo abismo. Los precios de los bienes y servicios han subido tanto que ni siquiera se pueden satisfacer las necesidades básicas de la población del país. La rupia se ha depreciado y el dólar ha subido sin control y las reservas de divisas del país han creado una enorme catástrofe económica con un déficit sin precedentes.
El régimen dictatorial de Rajapaksa y sus secuaces están atrapados en la trampa de la deuda del imperialismo, lo que obliga a los partidos representados en el parlamento, a los partidos políticos lacayos y opresores de la oposición, a saquear despiadadamente la mano de obra y los recursos naturales de Sri Lanka, obligados por los acuerdos económicos a explotar las industrias con los imperialistas estadounidenses, chinos y los expansionistas indios que lo están haciendo como precursores.
El Presidente y el primer ministro siguen chupando nuestra sangre inocente. Han arruinado la nuestra y las próximas dos o tres generaciones, fue la declaración de varios trabajadores que en la ciudad de Colombo, expresaron en medio de una de tantas manifestaciones. Y es que los hermanos Rajapaksa, son dos políticos reaccionarios que se han atornillado en el poder por décadas. Mientras uno de ellos ocupa el puesto de presidente, el otro fungía como Primer Ministro hasta el pasado 9 de mayo cuando abandonó su puesto, presionado por la lucha del pueblo en las calles. Este individuo, llamado Mahinda Rajapaksa además de estar con el cargo de primer ministro, fue antes presidente durante 10 años, de 2005 a 2015, y se había empotrado como Primer Ministro también entre 2004 y 2005, haciéndose celebre por ser la cabeza siniestra y asesina que ordenó la carnicería de varios miles de personas de nacionalidad tamil, acusados falsamente de ser parte del grupo armado* Tigres de Liberación de la Tierra Tamil*.
Este mismo asesino, junto con su hermano presidente, lanzaron toda su fuerza represiva contra la población, declarando el Estado de Emergencia el pasado 1 de abril como forma de castigar a la población por tomar las calles y exigir cambios de fondo. Todo el mes de abril fue de diarios combates en todo el país; de parte del gobierno ningún compromiso de medidas para paliar el hambre y todas las demás necesidades del pueblo; con gases lacrimógenos y represión desaforada pretendieron acallar la furia popular; pero el pueblo no retrocedió.
El mes de mayo la huelga creció y ante la respuesta obtusa del gobierno, el pueblo empezó a exigir la renuncia del Presidente, del Primer Ministro y de todo su gabinete. Las fuerzas represivas se lanzaron contra la población, y solo en la primera semana de mayo los enfrentamientos dejaron en Colombo, 9 muertos y más de 300 heridos.
Los reaccionarios sacrificaron a una de las 2 cabezas, el 9 de mayo el Primer Ministro renunció y salió huyendo de la furia popular, buscando con ello apaciguar a la población; pero el pueblo se mantiene en la exigencia de renuncia de los 2. El presidente se niega a dimitir, poniendo sobre la mesa la jugada politiquera de nombrar como primer ministro a un político de la oposición, quien ha sido Primer Ministro en otras ocasiones (1993 a 1994 – 2001 a 2004, en 2015 y entre 2018 y 2019), lo que deja al descubierto que es pura y llana politiquería que el pueblo no se ha tragado entero.
El estado de las contradicciones en este país, no es diferente en lo fundamental de las contradicciones en la mayoría de países del mundo; la crisis general del capitalismo la descargan sobre la población, la idea es exprimir los trabajadores en campo y ciudad para paliar la disminución de ganancias de los dueños del capital, y todos los gobiernos son puestos en el Estado para ejecutar esas políticas asesinas contra las masas.
Este mes explotó en Sri Lanka, esta semana inicia con una réplica en Túnez donde la población está en las calles exigiendo la renuncia del presidente y todo su gabinete; a comienzo de año fue el pueblo de Kazajistán, lo mismo pasa en centro y Suramérica, en la mayoría de países de África, en países europeos como Francia, España, etc. Por donde se mire, lo que se ve es una cadena de movilizaciones que fácilmente se convierten en levantamientos contra el Estado representado por el gobierno.
Lo que queda al descubierto es que el problema no son los políticos de turno, no son los gabinetes no son los primeros ministros; lo que se pone en evidencia, es que el problema es El Sistema, es el capitalismo y su Estado como aparato al servicio de los ricos y en contra de la población.
