Tomado de Maoist Road, 19 de febrero 2025
Camaradas obreros, trabajadores, traemos los saludos de los proletarios y comunistas italianos a esta importante manifestación contra el imperialismo y el fascismo con ocasión de la llamada conferencia internacional de Seguridad de la OTAN que en realidad analiza, decide y avanza hacia la guerra imperialista mundial.
Todos los gobiernos imperialistas aumentan desproporcionadamente los gastos militares y dicen explícitamente que es necesario prepararse para la guerra. Las potencias imperialistas de EEUU, la UE y la OTAN se equipan con armas cada vez más modernas y devastadoras y prevén el uso de armas nucleares que ponen en riesgo el futuro del mundo, unido a la creciente crisis climática medioambiental. Todos los países imperialistas refuerzan los ejércitos, militarizan los territorios y la sociedad, preparan a la opinión pública para la guerra, desarrollan la economía de guerra. El imperialismo ruso y el socialimperialismo chino son, por un lado, el blanco de esta ofensiva y, por otro, se montan en la crisis del imperialismo occidental, principalmente de EEUU, para un nuevo orden favorable, bajo la bandera del multilateralismo.
El imperialismo desata a sus perros guardianes como primera línea en la guerra y de la guerra contra los pueblos – véanse los regímenes que les son serviles en Israel, Ucrania, Siria, etc.
Todas las potencias imperialistas en connivencia y contienda entre sí y los gobiernos que les están subordinados están unidos contra los proletarios y los pueblos del mundo. La guerra tiene su origen en la crisis económica, sistémica, mundial del sistema capitalista/imperialista que exige un nuevo reparto del mundo.
Todos los Estados imperialistas y los gobiernos a ellos subordinados avanzan en la transformación de los Estados reduciendo y borrando la democracia burguesa, atacando las libertades democráticas y los derechos de los trabajadores y de las masas, llenando las cárceles de opositores políticos, estableciendo formas de dictadura cada vez más abiertas, que atacan los derechos de la mujer, la libertad de pensamiento, etc. y difunden el racismo, la cultura oscurantista y el fundamentalismo religioso.
Tanto en Alemania como en Italia practican cada vez más una dictadura, disfrazada de «democracia»; y ante el descontento, las protestas proletarias y populares, llevan a cabo una represión cada vez más amplia, un estado policial general que incluye además del ataque a los trabajadores y al derecho de huelga, ataques a los inmigrantes, a los derechos de la mujer, represión a los estudiantes, censura a los periodistas, monopolio de los medios de comunicación, etc.
Las elecciones se convierten así cada vez más en la expresión de una falsa democracia, abandonada por casi la mitad de los proletarios y de las masas populares y transformada progresivamente en un instrumento de consenso para el gobierno y de transformación reaccionaria del Estado del capital. No son ni pueden ser el lugar donde cambiar las cosas.
Por el contrario, necesitamos organizar la lucha general en las fábricas y en los lugares de trabajo, en los barrios proletarios, en las plazas. Necesitamos nuevas y fuertes organizaciones políticas y sindicales obreras y populares, necesitamos un frente único anticapitalista, antifascista y antiimperialista.
Necesitamos la unidad de lucha de los proletarios y de las masas populares de los países imperialistas y de las naciones y pueblos oprimidos por el imperialismo.
En Palestina hay una guerra de exterminio con masacres, bombardeos y destrucción, éxodo masivo y corre el riesgo de genocidio a manos del Estado sionista de Israel de tipo nazi apoyado por el imperialismo norteamericano, la UE, incluida Italia; la nueva presidencia fascista/imperialista norteamericana ha lanzado ahora un plan de solución final, por esto debemos realizar aún más un gran movimiento de solidaridad. Solidarizarse con Palestina es el primer deber internacionalista de los proletarios y de las masas populares del mundo entero.
El imperialismo es la miseria relativa y absoluta de los proletarios y de las masas oprimidas, de la pequeña burguesía empobrecida de las ciudades y del campo con recortes salariales, precariedad, desempleo, recortes en gastos sociales, salud, educación, medio ambiente; ampliación de la brecha entre regiones ricas y pobres; nueva esclavitud, desempleo juvenil, desigualdad de la mujer; costo de la vida.
En los países oprimidos por el imperialismo todo esto se agrava por la permanencia y preservación de la opresión nacional, colonial y neocolonial y feudal.
Debemos unirnos porque todos juntos debemos detener la marcha hacia la guerra imperialista, debemos detener el avance de los fascismos y las dictaduras, debemos luchar juntos para cambiar radicalmente nuestras condiciones de vida y de trabajo.
¡ES JUSTO REBELARSE! ¡ES JUSTO LUCHAR PARA BORRAR EL SISTEMA IMPERIALISTA DE LA FAZ DE LA TIERRA!
Detengamos la guerra imperialista y si estalla transformémosla en una guerra civil revolucionaria por el poder proletario
Detengamos la marcha nazi-fascista y a todos los gobiernos que los protegen y alimentan
Unámonos bajo la dirección del proletariado para hacer avanzar a los pueblos del mundo hacia la revolución socialista mundial, para erradicar el imperialismo y establecer así una sociedad sin explotación ni opresión de ningún tipo. Muerte al imperialismo y al fascismo libertad para los proletarios y los pueblos
Viva el internacionalismo proletario
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