En cientos de empresas y fábricas los despidos son el pan de cada día con la excusa del covid-19. Despidos directos o enmascarados obligando a cientos de obreros a firmar cartas de “retiro voluntario”, “licencias no remuneradas” o una rebaja en la jornada laboral con la correspondiente rebaja salarial. Otra modalidad que están usando es el adelanto de vacaciones, afectando la programación familiar que los obreros hacen cuando destinan un determinado tiempo para estar con sus hijos en el descanso escolar –hoy no hay vacaciones escolares, los jóvenes están estudiando desde casa- o para realizar algún viaje en familia. Por un lado, los capitalistas encontraron en el virus covid-19 la mejor excusa para rebajar salarios y despedir obreros, preferiblemente los más antiguos, sindicalizados o con mejores condiciones laborales. Por otro, continúan con su competencia frenética por acumular mercancías e incrementar sus ganancias en medio de una de las peores crisis económicas del capitalismo a nivel mundial.
En esa competencia interburguesa los que pagan los platos rotos son millones de obreros, no solo en Colombia, sino alrededor del mundo que, por un lado, son obligados a trabajar en medio de la pandemia, sin ningún tipo de protección de salubridad y en ramas de la producción no indispensables; y por otro, muchos son despedidos con el aval del régimen uribista que autorizó al Ministerio de Trabajo a hacerlo de forma express, en un contubernio que va en contra de los intereses de la clase obrera, realizado entre el Estado de los ricos y los monopolios capitalistas. Es decir, con cara pierden los obreros porque son obligados a producir en ramas no indispensables para la salud y alimentación del pueblo en condiciones no seguras; y con sello también pierden, porque están siendo tirados a la calle sin la consideración que muestran hipócritamente, junto al régimen, en redes sociales y en los grandes medios de comunicación.
Llamamos a denunciar ampliamente y de diferentes formas estos ataques cometidos en contra de los obreros y sus familias por parte de este Estado y de los capitalistas. Ya los obreros y algunas de sus organizaciones sindicales lo vienen haciendo usando las redes sociales. Desde hace varios días, desde el Portal Digital Revolución Obrera llamamos a denunciar a los capitalistas que están despidiendo en medio de la pandemia o usando cualquier tipo de artimaña para afectar a los obreros. En este enlace encontrarán algunas denuncias realizadas, como por ejemplo, en Ecopetrol, Oma, Casa Limpia, entre otras, las cuales llamamos a ampliar y difundir. El movimiento sindical y los revolucionarios deben exigir el cese de la producción en las ramas no indispensables de la economía, -¡la producción al servicio de las necesidades de la sociedad, y no al servicio de la ganancia!- sin la afectación del contrato de trabajo, es decir, que los obreros continúen recibiendo el sueldo además del pago de salud, pensión, cesantías y demás. Por otro lado, es urgente “adecuar algunas empresas para la producción inmediata de ventiladores para las Unidades de Cuidados Intensivos –UCI que se van a necesitar para atender la crisis.”, como se plantea en esta Plataforma para enfrentar el Covid-19.
Por medio de la unidad y organización independiente y revolucionaria de la clase obrera y de diferentes sectores del pueblo, teniendo como base la solidaridad de clase, se le podrá hacer frente a esta pandemia y salir victoriosos de ella, más fortalecidos y unidos como clase para llevar adelante las luchas venideras por la destrucción del sistema capitalista, verdadera pandemia mundial que debe ser destruida con la vacuna de la revolución proletaria mundial.