Hace unos días nos llegó un informe realizado por el compañero Vladimir Ramírez, un luchador vocero del asentamiento popular de Manizales. El informe relata las penurias que viven las familias sin techo, quienes han sido desplazadas de todas partes, algunas de sus tierras en el campo, otras por la miseria en las ciudades y no tienen otro camino que construir su vivienda en las laderas de las capitales, en terrenos que la mayoría de las veces son un peligro para sus vidas.
Esta tragedia de miles de familias en casi todas las principales ciudades del país, fue mucho más palpable durante la pandemia, cuando la gente hubo de resguardarse en sus hogares para protegerse del Covid-19 y los sin techo —que no contaban con la suerte de tener donde protegerse— fueron expulsados por el Estado de los terrenos donde se asentaban, demostrando así que a los explotadores y su aparato estatal, les importa cero la vida de sus “ciudadanos”.
Como nos cuenta el compañero en su informe, la situación no ha cambiado mucho, se sigue desplazando a las familias y las soluciones de vivienda no se han hecho efectivas.
Por el informe del compañero, las esperanzas están cifradas en que Gustavo Petro lleve a cabo lo que en campaña prometió; pero lo cierto es que los que tienen el verdadero poder el Estado no se lo permitirán, porque son los mismos que ordenaron los desalojos en pandemia y, como él mismo lo ha dicho, tiene el gobierno más no el poder; si queremos conquistar vivienda digna para el pueblo, sí o sí es con la lucha directa como se logrará tan anhelada reivindicación que merece el pueblo.
Al compañero que nos envió el informe y a todas esas familias que hoy están en esta situación, los invitamos a unirse junto con el resto de los trabajadores en la lucha por conquistar vivienda digna, empleo, tierra, salud, educación, paz… organizando las Asambleas Populares, que tengan el poder real y la libertad para luchar, obligando a los capitalistas —representados en el Estado— a ceder las peticiones planteadas.
Invitamos a los destechados a participar en la Asamblea Nacional Popular Independiente que se realizará en Cali los días 13 y 14 de julio. Allí con completa independencia del Estado e incluso del gobierno, los de abajo decidiremos lo que queremos para mejorar nuestras condiciones y la forma cómo lo conquistaremos.
Revolución Obrera
Bueno compañeros, les cuento esta historia que nace en una necesidad del ser humano; económica y por el empobrecimiento sin oportunidades laborales y con el afán de cubrir sus necesidades de vivienda para él y los suyos; debido a estas necesidades una o dos familias deciden hacer una retoma a la montaña y apropiarse de lo que les pertenece pero que unos pocos adinerados se han adueñado de ellas repartiéndolas a su antojo.
Luego de la decisión que han tomado estas dos familias, una decisión valiente aun sabiendo que un sistema clasista y represivo podría tomar represalias y desalojarlos bruscamente, van llegando más personas con las mismas necesidades, mujeres cabezas de hogar, desplazados del conflicto armado, indígenas y así muchas más hasta conformar una gran comunidad.
En el asentamiento donde vivimos hay un aproximado de 30 familias en la parte alta, 360 en la baja, 60 en el asentamiento de al lado llamado Samaria, 600 en el Alto Samaria, siendo entre estas con más antigüedad el asentamiento de la Vía del Guamo; hay personas con 10, 15, 12, 8 años hasta llegar a los 30 años en el asentamiento del Alto del Guamo, asentamiento El Popular donde hubo que reasentar el asentamiento ya que estaba situado en una propiedad privada y su dueño lo reclamó; este fue uno de los primeros tropiezos que hubo, tocó reubicar en un predio del municipio; seguido a este tropiezo la alcaldía envía una orden de desalojo a estas familias.
Aparte estamos en uno de los picos más altos de la pandemia donde la comunidad alterada y vulnerable comienza a buscar ayuda y los direccionan al sindicato de La Chec Sintráelecol que ya tenía un proceso de organización y unidad con el asentamiento de la Vía del Guamo al igual que su corporación Jorge Luis Ortega, acudiendo ellos al llamado que le hacía la comunidad, y haciéndoles una asesoría y un acompañamiento jurídico entablaron una acción de tutela que exige cumplir con unas obligaciones de caracterización de la población asentada, mujeres cabezas de hogar desplazados víctimas del conflicto, jóvenes, niños, viejos, población vulnerable en pobreza y pobreza extrema, que hubieran cifras exactas del desempleo del informalismo, aparte de esto generar planes de vivienda accesibles a una comunidad vulnerable, legalizar o reubicar las comunidades, todo esto antes de efectuar un desalojo; el clima también era factor para no desalojar si se hacía en épocas de lluvia.
Varios colectivos, organizaciones sociales y populares, centrales de trabajadores sindicatos y en este tiempo jóvenes de la primera línea ya que nos encontrábamos en el marco del paro nacional, todos estos grupos Unidos con la corporación Jorge Luis Ortega y el sindicato de La Chec acompañaron para reforzar la comunidad y no dejarla desalojar, al mismo tiempo se hacían trabajos sociales de organización unidad y lucha sumado a las asambleas populares, hasta que el juzgado falló y decidió unificar la acción de tutela con la del asentamiento de más abajo o más bien enseguida y que valiera para los dos con un poco más de antigüedad, este fue uno de los primeros logros, de allí en adelante la corporación Jorge Luis Ortega ha hecho un trabajo y organización y unidad.
Mientras uno de los asentamientos se fortalecía en su interior y se organizaba y se terminaba de reasentar, se toma la decisión de unir ideas con el otro asentamiento ya que embarcaban la misma lucha y causa pues no lo separaban más de 100 metros, uno era en la parte alta en el cual vivo con 30 viviendas y el otro llamado La Vía el Guamo en la parte baja con 300 a 360 viviendas con mucha más antigüedad basta aclarar que todo esto se daba en un sector de la ciudad estigmatizado por un gran problema social como: una alta tasa de delincuencia, drogas, pandillas, pobreza, enfrentamientos por fronteras entre barrios que han dejado muchos muertos y grandes dificultades sociales.
Mientras uno de los asentamientos se fortalecía y organizaba y el otro seguía su lucha, en la parte alta de la montaña comienzan a asentarse nuevas familias casi al igual que por las mismas causas que lo habían hecho los otros asentamientos, sumando a esto un empobrecimiento por una pandemia mal manejada y que dejó cantidad de personas endeudadas pobres debiendo arriendo y con una seguridad alimentaria deficiente; todo esto ayudó para acelerar el asentamiento uno en la parte alta con un aproximado de 500 a 600 viviendas y en la parte media aproximadamente de 50 a 60 viviendas y da inicio al asentamiento del Alto Samaria mirador de las cruces y Bajo Samaria todos ubicados en la misma comuna y en el mismo sector; cuatro asentamientos que no los distanciaban uno el otro más de 100 a 200 metros de distancia.
Asentamiento El Popular, Alto del Guamo, San Sebastián, asentamiento la Vía el Guamo, asentamiento Bajos Samaria, asentamiento Altos Samaria mirador de las cruces.
Las comunidades mismas asentadas fueron las constructoras de sus hogares, alcantarillados, carreteras y escalas de acceso de bajar agua de nacimiento desde la montaña, canalizar otras y redireccionar sus cauces para evitar deslizamientos y muchas otras actividades de infraestructura; con el pasar de los días, meses la comunidad fue sintiendo las necesidades del acceso al agua potable, a la energía, el derecho a una vivienda digna a una apropiación del suelo legal para poder organizar sus casas en material, a que se incluyeran en la sociedad, que se miraran dignamente y desde la corporación Jorge Luis Ortega y reunidas con líderes de la comunidad se da inicio a la conformación de asociaciones de vivienda, una por cada asentamiento cada una legalmente constituida y con personería jurídica, que cada una se encargara de iniciar su lucha con derechos de petición, plantones, movilización, acciones de tutela y mucho más, difundiendo el problema en medios de comunicación alternativo y regional sin muchas ganancias, pero siguiendo en pie de lucha, pues todas las peticiones y exigencias que se hacían a la administración ellos se refugiaban y se escudaban en caer en un trámite ilegal si se llegase a ayudar.
Después de un tiempo de cada asociación hacer su lucha individual y ya viendo varios acercamientos con las juntas de los otros asentamientos y con la colaboración de la corporación Jorge Luis Ortega, que siempre ha estado presente y asesorando la lucha, se unen las asociaciones y nace la Coordinadora de Asentamientos Populares de Manizales, una Unión de cuatro asociaciones de vivienda con los mismos objetivos e intereses de una vivienda digna y una calidad de vida, con la misma necesidad de servicios públicos; desde allí y ya Unidos y más grandes, hemos efectuado grandes movilizaciones, plantones, reuniones en mesas de trabajo con la administración municipal sin muchos arreglos y más bien siempre mostrándonos la bota militar para un desalojo.
Desde allí se empieza también una gran campaña para apoyar un gobierno por el cambio, un gobierno progresista como lo es el gobierno del compañero Gustavo Petro y Francia Márquez, logrando sacarlo victorioso participando en diferentes espacios, socializando el problema de vivienda, haciendo de trabajos de asambleas populares, volanteando y el voz a voz. También se da una gran campaña para no ser gobernados por los mismos a nivel regional, allí se sufren tropiezo pues llega a la alcaldía un alcalde que no defiende los intereses de una clase más desfavorecida y sí a la clase burguesa con el empresariado y defendiendo el verdugo del pueblo, como lo es su aparato militar; de todas maneras la lucha sigue con subidas y bajadas, al pasar del tiempo se han incendiado casas en los asentamientos, un aproximado de 5 a 8 casas, una de ellas con víctimas fatales de dos niños y una joven de 17 años, madre de los niños; han surgido caídas de árboles, conatos de desalojo como el que se vivió el día de las votaciones para el alcaldía y gobernación de la ciudad, donde la comunidad organizada salió y estuvo atenta.
Tanto insistir, cartas allí y allá, movilizaciones y por los compañeros de la corporación se ha logrado un acercamiento con el gobierno nacional con el Ministerio de Vivienda Ciudad y Territorio, una de sus funcionarias viene desde Bogotá en este año a Manizales y cruzamos palabras con ella, se pone al tanto de la situación y se da fecha para comenzar unas capacitaciones de legalización urbanística.
También se da como logro que es la primera vez que como organización y comunidad organizada nos movilizamos en un Primero de Mayo en apoyo también a un gobierno y unas reformas, un gran paso como colectivo y organización.
Días posteriores se da la noticia de la visita del presidente Gustavo Petro y su gabinete ministerial a la ciudad y que se haría en la comuna donde se encuentran los asentamientos y comenzamos a preparar todo para acompañar y hacer las exigencias como comunidad, sorpresivamente desde la alcaldía de Manizales, en cabeza de una funcionaria del Ministerio de Vivienda y un funcionario de Planeación, el día antes que ultimábamos detalles para la visita del presidente Gustavo Petro, se reúnen con nosotros los líderes de los asentamientos, mejor dicho la coordinadora de asentamientos y nos socializan un proyecto de un plan de vivienda donde la alcaldía da las tierras, el estudio de ellas y la legalización donde el gobierno debería aportar 58.000.000.000 y harían falta por cada vivienda 31.000,000 financiándonoslos a 15 años, con cuotas mensuales de 280.000, que en este caso serían construcciones verticales, como quien dice torres de apartamentos, más o menos vendrían costando en total los apartamentos cerca de 80 millones de pesos cada uno, constarían de dos habitaciones o tres dependiendo de las decisiones que se tomen.
Este proyecto entra en una fase de estudio y aprobación con una duración máxima de dos años, si en dos años no se toman decisiones, el proyecto se caería y ya no se podría realizar, sería ya de parte de ellos la administración municipal y la comunidad de los asentamientos y sus líderes tocar el tema y hacer la exigencia al gobierno nacional, aprovechando su llegada a la ciudad para que de Mi Casa Ya y unos recursos de un plan de vivienda se den estos 58.000.000.000 millones de pesos para dar comienzo a este proyecto.
Y así fue ese día que nos visitó el presidente Gustavo Petro, el alcalde Rojas oportunistamente y encaramándose con una lucha que llevaban las comunidades abandonadas por la administración, habla sobre el proyecto, hablando con pertenencia como si algún día la administración hubiera querido colaborarnos puso en la mesa el tema.
Ya al momento de dar la palabra a los líderes, solo pudo una sola persona y quedó a cargo del compañero Mateo Giraldo Valencia coordinador general de la corporación Jorge Luis Ortega y vocero de la coordinadora de asentamientos, habla sobre el tema, hace la exigencia del dinero y hace la debida presentación de la coordinadora y la corporación una intervención muy clara, corta y puntual del tema de la cantidad de dinero que se necesitaba y en qué consistía el proyecto; después de su intervención habla el Presidente y la Ministra de Vivienda acerca del tema, se veía una muy buena voluntad de colaboración de parte del gobierno nacional con su presidente y la Ministra de Vivienda, inclusive se habló que si las tierras que estaban se podrían estudiar la forma de hacer barrios auto construibles, legalizar los asentamientos que ya están y mitigar sus riesgos volver a lo que era antes y dar una reubicación inmediata a las personas que estaban en alto riesgo.
Habló también la ministra y el gobierno nacional y el presidente acerca de que era una cuota baja y no muy baja porque había personas en un estado alto de vulnerabilidad, donde no podrían estar accesibles a una cuota ya que no tenían las capacidades económicas para hacerla, por esta misma forma se dio paso a una posible autoconstrucción.
Ya terminando el momento, se trabaja al interior de la organización en colectivo en capacitaciones en temas sociales, de buenos líderes, resolución de conflictos e integraciones entre los mismos asentamientos, con el fin de unificarnos más, conocer las caracterizaciones exactas y los censos que se han hecho en el territorio, estudiamos mucho más internamente para poder tener unas bases firmes en el trabajo y lucha que se hace una radiografía interna logros y proyectos.