La Constitución Política de la burguesía colombiana dice en el Artículo 20: “Se garantiza a toda persona la libertad de expresar y difundir su pensamiento y opiniones, la de informar y recibir información veraz e imparcial, y la de fundar medios masivos de comunicación. Estos son libres y tienen responsabilidad social. Se garantiza el derecho a la rectificación en condiciones de equidad. No habrá censura”.
Ese artículo sirve muy bien a esa clase parásita cuando va en defensa de sus propios intereses burgueses, cuando promueve el individualismo, la falta de solidaridad, la cultura del sálvese quien pueda, cuando los medios masivos de comunicación silencian el robo a las entidades gubernamentales desde el mismo Congreso, cuando silencia la corrupción mantenida y alimentada por los políticos, ministros, ex presidentes y demás hampones burgueses y terratenientes.
Es un artículo hecho a la medida de sus necesidades, que no son otras diferentes a las de distorsionar la realidad para crear opinión pública favorable a ellos, para poner a pensar y hablar al pueblo en general de uno u otro bando político y mover a las masas de explotados para que defiendan a sus propios verdugos.
Cuando ese artículo no está siendo aplicado textualmente como la burguesía y los terratenientes lo necesitan, promueven inicialmente la censura desde el establo parlamentario aprobando reformas a dicho artículo, para que los medios masivos de comunicación se ajusten a lo que exigen ellos como difundir el pensamiento, la ideología y la cultura burguesa, eso es lo que exigen; cuando no logran imponer la censura con las reformas, decretan la suspensión de licencias o el método más ruin como el asesinato a periodistas y demás comunicadores, es así como muchos medios de comunicación han sido perseguidos, tergiversados y cerrados, por lo tanto no es nuevo lo sucedido con el Canal Uno y su noticiero Noticias Uno la red independiente, el cual es el objetivo principal en ser atacado pues la información expresada en éste es mucho más confiable que la emitida en los demás canales como RCN de propiedad del señor Ardila Lule, CARACOL de propiedad del grupo Santo Domingo, Canal Trece, City TV, y muchos más.
Han sido muchos los ataques que ha recibido este canal por los retrógrados del Centro Democrático y su lúgubre ideólogo el miserable senador Álvaro Uribe Vélez, quien siente enfermiza rabia por este noticiero y sus periodistas ya que en muchas ocasiones lo han entrevistado siendo insultados y agredidos por éste y sus escuderos solo por informar valientemente y buscar la verdad; han incomodado a muchos ladrones y asesinos del Estado colombiano al sacar a la luz pública sus tramoyas, chanchullos, y asesinatos ordenados por ellos mismos.
El artículo 20 es una gran mentira de la A hasta la Z; es tan incoherente y falso como toda la misma Constitución Política hecha a la medida de los parásitos burgueses, terratenientes y los imperialistas, por eso la defienden a sangre y fuego, porque la pueden reformar las veces que les dé la gana ajustándola siempre que lo necesiten.
La Constitución Política de la burguesía colombiana en su artículo 75, define el espectro electromagnético como “un bien público inajenable e imprescriptible, sujeto a la gestión y control del Estado”, y garantiza la “igualdad de oportunidades para acceder a su uso”, en los términos que fije la ley burguesa el Estado intervendrá, para “garantizar” el pluralismo informativo y la competencia, y para “evitar” las “prácticas monopolísticas en el uso del espectro electromagnético”.
Los artículos 76 y 77 de esa misma Constitución burguesa establecen que la intervención estatal en dicha actividad estará a cargo de un organismo de derecho público, a cargo de la ejecución de la política en materia de televisión, “sin menoscabo” de las libertades consagradas en la misma Constitución.
Todo eso no es más que letra muerta; es evidente que alteran su propia ley o no la tienen en cuenta a la hora de ejercer su dictadura y beneficiar a los grandes empresarios de la información. El Estado es la fuerza organizada de la burguesía, los terratenientes y los imperialista, en nuestro caso a los norteamericanos, la información como tal está bajo el control de ellos y por ende son los que dicen quiénes tienen derecho a utilizar la tecnología, y el espacio aéreo y electromagnético para utilizar antenas de onda corta y larga y los medios avanzados como son los satelitales, son ellos los dueños del capital y los medios masivos de comunicación por lo tanto son ellos quienes monopolizan las comunicaciones y la información misma, son ellos quienes deciden qué sale al aire y qué se archiva, qué periodista es bueno por lo arrodillado a ellos y cuál no por lo independiente, sincero y honesto, son ellos los que le ponen precio a la información y a los informadores.
La sociedad piensa conforme a lo que ellos quieren que piense, de ahí que la verdad, basada en la comunicación y la información tiene un sello de clase la cual sirve a los intereses de una de las dos antagónicas clases que hay, la burguesía o el proletariado; embrutece o libera, altera y tergiversa la realidad o dice la verdad sin tapujos.
Vistas así las cosas, para liberar a la sociedad en general e imponer su propio mundo, el proletariado necesita medios de comunicación independientes, sin ningún tipo de injerencia burguesa o de la pequeña burguesía, que difundan plenamente su pensamiento, su ideología, su cultura y si en estos estuvieran los otros sectores de clase, es el proletariado el responsable y dirigente de estos medios de comunicación.
La libertad e independencia de la comunicación y la información está dada para la clase social que los dirige no para la clase contraria, no para la sociedad en general, no para la supuesta democracia; vivimos bajo la dictadura burguesa y obviamente la información está manipulada por esta parásita clase social, es normal la censura de prensa en esta sociedad dividida en clases, pero hay que denunciarla y rechazarla diariamente para elevar el pensamiento político de las masas, y lograr transformar por la vía revolucionaria esta sociedad capitalista e imponer el socialismo, el cual es democracia para el proletariado y dictadura para la burguesía.