Para la clase obrera es conocido que la empresa Avianca ha significado persecución, laboral, hambre para las familias de los trabajadores injustamente despedidos, y sobre todo persecución sindical, con el objetivo de acabar con estas organizaciones al interior de la empresa.
También es sabido que Avianca es uno de los peores ejemplos en la tercerización laboral, puesto que descarga distintas funciones a supuestos terceros para eximirse de sus responsabilidades contractuales. Así es como funciona TAMPA CARGO S.A.S, que hace parte del grupo Avianca y se conoce como Avianca Cargo. Esta tercerizadora por estos días despidió dos supervisores afiliados a la organización sindical Asotratampa, por cumplir su labor de defender los derechos de los trabajadores, denunciando las falencias de la empresa en la prestación del servicio y el maltrato a los usuarios.
Como respuesta a esta arbitrariedad, el sindicato realizó un mitin el pasado 1 de junio en el aeropuerto El Dorado de Bogotá, el cual disgustó a la patronal puesto que salió a ripostar que los despedidos habían renunciado voluntariamente. ¡Falso! esas renuncias fueron presionadas por el señor Tito Manuel Zuluaga, gerente de carga para Colombia de la empresa Tampa Cargo S.A.S, quien obligó a los compañeros a renunciar.
Los trabajadores saben que individualmente se está en desventaja frente a estos métodos coercitivos, por eso es necesario fortalecer las organizaciones sindicales y no permitir la represión y persecución con la movilización, como acertadamente lo hicieron los compañeros el pasado 1 de junio.
Reiteramos desde el portal -el cual está al servicio de todos los obreros y luchadores- que la tercerización laboral y el hostigamiento que se vive al interior de las empresas, se pueden echar para atrás luchando contra la reforma laboral, la reforma pensional, aboliendo la ley 50 y el decreto 1174; todas medidas aplicadas por el Estado en defensa de los intereses de los capitalistas para obtener mayores ganancias. Lucha que habrá que dar independiente de quien quede como presidente, puesto que el poder económico de las clases dominantes seguirá intacto, los explotadores, junto con los imperialistas continuarán ordenando medidas en contra de la clase obrera.
En ese sentido es muy importante que el movimiento sindical se fortalezca cada vez más y se consoliden las federaciones con independencia de clase, puesto que su papel en un próximo estallido social será crucial para garantizar que llegue a buen término la conquista de las reivindicaciones del pueblo, no con un gobierno de los explotadores, sino con un gobierno de los obreros y campesinos.
