Ha sido la decisión del gobierno uribista de Duque, en medio de la crisis en salud por la aparición del Covid-19.
Y es que el problema aquí no es si se cierran o no las fronteras, si se cierran o no los aeropuertos ¡No! El principal problema, es que este Estado en cabeza del sector mafioso de la burguesía no tiene la más mínima idea de cómo atender una situación de emergencia como la actual; como tampoco tiene la capacidad para atenderla, pues si existiera la cantidad de pruebas suficientes, los cierres o cancelación de vuelos, no serían un problema, simplemente a todo el que llegue se le aplica la prueba y se verifica si es o no portador del virus y, en últimas eso lo sabemos, jamás el Estado capitalista ha podido resolver los problemas del pueblo; si ahora se preocupan, es porque el Coronavirus a diferencia de otras enfermedades como el dengue por ejemplo, es un virus que no diferencia clases sociales. Pero lo peor de mantener el aeropuerto “abierto las 24 horas” durante todo este tiempo de supuestas medidas “importantes” para prevenir la expansión del virus, es que por encima del bienestar de la especie, está la ganancia.
De ninguna manera se iba a cerrar el aeropuerto como primera medida, pues los vuelos de carga son el blindaje perfecto para los cochinos negocios de los grandes narcotraficantes del país, cerrar el aeropuerto El Dorado, era básicamente dejar de percibir ganancia. Y, es tanta la mezquindad de esta burguesía, que ni siquiera se preocuparon por tomar las mínimas medidas de protección para los empleados y, menos para los pasajeros a quienes con declaración juramentada de “no portar el Coronavirus” les permitieron entrar al país; cuando mantienen hacinados a los pasajeros que esperan vuelos retrasados; cuando ni siquiera son capaces de indicar un protocolo a empleados y usuarios para la prevención de contagio. Ahora el títere Duque anuncia que a partir del 23 de marzo no entrarán pasajeros de vuelos internacionales, como si esa medida sirviera ya de algo; este gobierno hace parte de un Estado inservible, que ni teniendo los ejemplos en las narices es capaz de prevenir una pandemia, sobre todo en Colombia que ni siquiera tiene un sistema de salud, pues lo que hay es un miserable negocio que le cobra al pueblo con la vida misma si es necesario.
Las masas deben cuidarse a sí mismas, solidarizarse con los más vulnerables, prevenir posibles contagios, pero sobre todo exigir la centralización del sistema de salud y claro estar vigilantes para que estos malditos burgueses en medio del pánico, no vayan a aprobar el paquetazo de Duque.
