El Estado sionista de Israel continúa con su campaña militarista de genocidio contra el pueblo palestino y su afán de expansión colonialista. Desde hace unos meses también viene realizando ataques contra otros pueblos de la región. El pasado 9 y 10 de septiembre el ejército israelí lanzó cerca de 15 misiles hacia el territorio sirio contra las ciudades de Damasco, Tartus, Hama y Homs, dejando como resultado 25 muertos y 40 heridos, los sionistas justificaron el ataque bajo la excusa de destruir los centros de investigación militar de Siria.
Días posteriores, las fuerzas armadas de Israel hicieron explotar simultáneamente 1.000 dispositivos de comunicación de miembros de Hezbolá residentes en el Líbano, dejando el saldo de por lo menos 50 personas muertas, incluyendo una niña de 8 años y 4.000 heridos, de los cuales 200 personas se encuentran en estado crítico. Este ataque se presenta luego de las declaraciones del criminal primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, de expandir los objetivos militares más allá de Gaza hacia la frontera de Israel con el Líbano. Hezbolá ha respondido a los intentos de incursión por parte de Israel a territorio libanés desde que se intensificó la campaña de genocidio el pasado 7 de octubre. Desde entonces, la campaña militar expansionista de Israel hacia el Líbano ha ido en aumento. El 23 de septiembre, los sionistas bombardearon la ciudad de Beirut, capital del Líbano, ¿el resultado? 558 libaneses asesinados y cerca de 1.835 heridos. Los bombardeos de Israel contra el pueblo libanés continuaron, aumentado la cifra de muertos por bombardeos a más de 650 personas. Estas ofensivas militares de los sionistas han obligado a más de 110.000 libaneses que habitan en el sur del país en la frontera con Israel a desplazarse hacia el centro o migrar hacia Siria.
Herzi Halevi, comandante en jefe del Estado Mayor israelí, mostrando todas sus intenciones colonialistas, manifestó que los bombardeos hacían parte de los preparativos para una invasión terrestre sobre el sur del Líbano. El 27 de septiembre Israel bombardeó nuevamente Beirut utilizando 80 toneladas de bombas, aumentando la cifra a 720 libaneses asesinados, entre ellos se encuentra Hasan Nasrallah, secretario general de Hezbolá. Este asesinato despertó la indignación aun mayor de los pueblos árabes quienes realizaron manifestaciones en el Líbano, Cisjordania, Siria, Irán, Irak y Yemen. También se presentaron algunas manifestaciones en países de Europa como Inglaterra, Alemania y Francia. Y en algunos países africanos como Nigeria[1].
Ese mismo día del 27 de septiembre, Netanyahu en su discurso ante la Asamblea General de la ONU manifestó que continuaría con sus ataques contra los palestinos y contra todo el que lo apoye y, haciendo uso de mapas dividió a Medio Oriente y el Norte África en dos sectores: los «bendecidos» (Israel, Egipto, Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos y Sudán) contra los «malignos» (Palestina, Irán, Yemen, Irak, Siria y Líbano).
Este 30 de septiembre, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) bombardearon nuevamente Beirut y de paso anunciaron que daban inicio a lo que llamaron «incursiones terrestres limitadas, localizadas y selectivas» en el sur del Líbano como parte de la operación «Flecha del Norte».
Eso obligó al Ejército libanés a replegarse 5 kilómetros de la llamada «Línea Azul» en la frontera con Israel. Las fuerzas armadas de Hezbolá respondieron a la invasión colonial militarista israelí con ataques al ejército sionista en la frontera y con lanzamiento de cohetes hacia las ciudades israelíes cercanas al Líbano, a su vez, han manifestado que tenían previsto un ataque terrestre por parte de los sionistas y que están dispuestos a dar una «batalla larga».
Esta invasión de Israel hacia el Líbano, así como la campaña de genocidio y colonización que viene cometiendo contra el pueblo palestino y ahora también libanés, no hubiese sido posible sin el apoyo de Estados Unidos. Lloyd J. Austin, actual secretario de defensa del imperialismo yankee, anunció que su país mantiene su política de apoyar el «derecho de defensa de Israel» y que va a responder ante cualquier intromisión por parte de Irán u otro país como Yemen o Siria en contra de esta operación militar israelí en territorio libanés.
Aun así, Irán ha respondido con un ataque con misiles balísticos contra ciudades de Israel, en especial en la capital Tel Aviv.
La situación en el Medio Oriente se agrava. Los sionistas criminales de Israel están decididos a continuar su campaña genocida contra el pueblo palestina en la Franja de Gaza, al tiempo que adelanta la operación militar contra el pueblo libanés. Como lo ha mencionado el camarada León, vocero de la Unión Obrera Comunista (mlm), esta operación militar es parte de los intentos de Israel para agudizar el conflicto y que este se convierta en una guerra regional contra los países árabes que considera «malignos», de esta manera podrá expandir sus fronteras y su poderío geoestratégico en el Medio Oriente como punta de lanza de los imperialistas occidentales en esa zona.
Son claros los intereses expansionistas y de control del imperialismo, en particular el estadounidense, que a través de su fiel sirviente Israel abre la brecha a punta de bombardeos y genocidios, es por eso que los comunistas en todo el mundo deben acelerar sus encuentros, deben encontrar sus puntos de unidad y resolver la manera de actuar como un destacamento a nivel mundial, para impedir que los imperialistas impongan su guerra de rapiña y con ella arrasen con gran parte de la humanidad. El Movimiento Comunista Internacional, requiere una lucha firme por su unidad en contra de los preparativos de guerra imperialista, de la agresión a los pueblos del mundo y, en solidaridad con la Guerra Popular en India y Filipinas, así como con el pueblo palestino que está en medio de los asquerosos intereses de los asesinos sionistas e imperialistas.
¡No es una guerra, es un genocidio!
¡Fuera imperialistas de Palestina, Líbano, Siria y de todo el mundo!
[1] https://heraldorojo.org/2024/09/29/millones-toman-las-calles-en-todo-el-mundo-para-protestar-por-el-asesinato-de-hassan-nasrallah/
