Este Primero de mayo fue especialmente majestuoso en la movilización revolucionaria de las masas encabezadas por la clase obrera de todos los países. Millones de ellos inundaron las calles de las principales ciudades del mundo recordándole a los reaccionarios, que contrario a lo que ellos quisieran, la clase obrera crece todos los días convirtiéndose en la fuerza más poderosa que existe sobre la faz del planeta. La expansión del capitalismo como sistema de producción, es una de las características del capitalismo imperialista que ha encadenado absolutamente toda la economía del planeta en una sola red entrecruzada que ha hecho que la clase obrera se multiplique de manera exponencial y lleve a una cualidad diferente su fuerza. La época en que se concentraba solamente en las ciudadelas imperialistas ha dado paso a una nueva condición donde en muchos de los países oprimidos los proletarios han tomado la delantera y hoy ocupan el papel de vanguardia de la lucha revolucionaria gracias al carácter capitalista de su economía. Y este Primero de mayo, así lo dejó refrendado con las portentosas manifestaciones.
Pero además de la cantidad de fuerza obrera en todo el mundo, los proletarios y demás masas trabajadoras del campo y la ciudad destacaron el contenido revolucionario de la manifestación, reportándose un alto contenido anticapitalista y de denuncia al Estado reaccionario en sus diversas formas. Con diversos grados de conciencia, las masas denunciaron la manera como las clases reaccionarias y sus gobiernos de turno han descargado sin misericordia las consecuencias de la crisis del capitalismo mundial; el hambre y las enfermedades, el desempleo de una gran parte de las masas junto con la superexplotación de millones de hombres y mujeres, el incremento desmedido de la represión asesina de las fuerzas estatales y paramilitares contra las manifestaciones, el desmedido presupuesto para la industria militar y con ello los preparativos para una guerra reaccionaria de grandes proporciones, la destrucción sin límites de la naturaleza que cada día refuerza la verdad de que el capitalismo no puede ni quiere detenerse en su devastación, la denuncia a las acciones de los imperialistas en diversas partes de la tierra que ha llevado a millones de personas a deambular en calidad de desplazados y refugiados….
Todo ha sido motivo para que este Primero de Mayo las masas, con el proletariado al frente hayan salido a las calles a realizar poderosas manifestaciones que en no pocas partes terminaron en fuertes enfrentamientos con los esbirros del poder estatal burgués y reaccionario.
Y el movimiento revolucionario, entre él, el movimiento comunista, avanzó en su vinculación más directa con el ascenso de las masas. Grandes y variados estandartes con las efigies de Marx, Engels, Lenin, Stalin y Mao Tse-Tung; hoces y martillos sobre muchas banderas rojas, fueron un punto importante en las manifestaciones. Y donde los comunistas revolucionarios pudieron, tomaron las tarimas de las manifestaciones para llevarle a las masas el mensaje fresco y revolucionario que llena de perspectiva la lucha, toda vez que pone en su lugar a quienes bajo supuestas posturas de izquierda, pretenden reducir las aspiraciones del proletariado a contentarse con las migajas que brinda el establo parlamentario. Discursos contundentes contra el capitalismo, llenaron de alegría a las masas. Y en algunas partes, donde no se podía encabezar las manifestaciones, los obreros revolucionarios, encabezados por los auténticos comunistas, organizaron bloques internacionalistas y revolucionarios que llamaron la atención y despertaron la admiración de las masas, lo que fue además adornado por los cánticos del himno del proletariado mundial: La Internacional.
Este Primero de Mayo, no fue un carnaval electorero, tampoco un desfile pacífico y de fiesta burguesa; fue un día combativo y revolucionario, una jornada internacional contra el yugo de la explotación asalariada, un día para recordarle a los reaccionarios que sus días están contados, pues el ejército de los proletarios crece todos los días y nuevos destacamentos de jóvenes están tomando las banderas de la lucha revolucionaria para prepararse y avanzar en la construcción del Partido Comunista Revolucionario en cada país y con ello darle cuerpo a la nueva Internacional Comunista.
Unión Obrera Comunista (mlm)
4 de mayo de 2019
