1. Según el marxismo, el problema de las elecciones no es un problema de principios sino de la táctica; es decir, exige al proletariado revolucionario el análisis concreto de la situación concreta en cada farsa electoral para definir una actuación política correcta que se corresponda con la marcha de la revolución.
Por consiguiente, no se trata de la actitud general de los comunistas frente al Estado y a la república parlamentaria cuya destrucción es una necesidad de toda verdadera revolución. Sino de esclarecer en cada caso concreto cómo aprovechar un episodio de la lucha entre las distintas facciones de la burguesía y los terratenientes por el control del Estado para hacer avanzar la revolución.
2. Respecto a la táctica dice Stalin: “La misión primordial de la táctica es determinar las vías y los medios, las formas y los procedimientos de lucha que mejor correspondan a la situación concreta en cada momento dado y que mejor coadyuven al éxito estratégico. Por eso, las acciones de la táctica y sus resultados no deben ser valorados en sí mismos ni desde el punto de vista del efecto inmediato, sino desde el punto de vista de las tareas y de las posibilidades de la estrategia”. (En torno a la Estrategia y la Táctica) Y agrega en Los Fundamentos del Leninismo: “La misión de la dirección táctica consiste en dominar todas las formas de lucha y de organización del proletariado y en asegurar su empleo acertado para lograr, teniendo en cuenta la correlación de fuerzas existente, el máximo resultado, necesario para la preparación del éxito estratégico”.
3. Respecto a las formas de organización y de lucha dice Lenin: “El marxismo admite las formas más diversas de lucha; además, no las “inventa”, sino que las sintetiza, organiza y hace conscientes las formas de lucha de las clases revolucionarias que aparecen por sí solas en el curso del movimiento. El marxismo, totalmente hostil a todas las fórmulas abstractas, a todas las recetas doctrinas, exige que se preste mucha atención a la lucha de masas en curso que, con el desarrollo del movimiento, el crecimiento de la conciencia de las masas y la agudización de las crisis económicas y políticas, engendra constantemente nuevos y cada vez más diversos métodos de defensa y ataque”. (Sobre la “Guerra de guerrillas”).
4. Lenin subraya además que “… el marxismo exige que la cuestión de las formas de lucha sea enfocada históricamente. Plantear esta cuestión fuera de la situación histórica concreta significa no comprender el abecé del materialismo dialéctico. En los diversos momentos de la evolución económica, según las diferentes condiciones políticas, cultural-nacionales, costumbrales, etc., aparecen en primer plano distintas formas de lucha, y se convierten en las formas de lucha principales; y, en relación con esto, se modifican a su vez las formas de lucha secundarias, accesorias. Querer responder sí o no a propósito de un determinado procedimiento de lucha, sin examinar en detalle la situación concreta de un movimiento dado, la fase dada de su desenvolvimiento, significa abandonar completamente la posición del marxismo”. (Idem).
5. A propósito de las formas de organización y de lucha, hay que estar atentos a las formas nuevas que aparecen en el transcurso del movimiento y que además hay que examinarlas históricamente; en Colombia es necesario reconocer dos hechos: 1) La actitud de las masas frente a las elecciones ha sido históricamente de abstención electoral mayoritaria, alcanzando por períodos más del 70% de la población apta para votar. Esta actitud del pueblo no significa abstención política, apatía o indiferencia como pregonan los partidos burgueses y pequeñoburgueses sino que constituye una posición política de rechazo a los politiqueros y de desconfianza en el Estado. 2) Es una actitud espontánea todavía y por ello en ocasiones aumenta el porcentaje de votantes como ocurrió en las elecciones pasadas a la presidencia, pero hasta el momento nada indica que esa constante se haya revertido como sugieren algunos revolucionarios.
6. Respecto al período actual de la revolución, los comunistas admiten que se encuentra en un período de defensiva estratégica, de acumulación de fuerzas, siendo su tarea central la construcción del Partido de la Clase Obrera, dispositivo estratégico principal para el triunfo de la revolución. Sin embargo, la agudización de la lucha de clases y el ascenso sostenido del movimiento revolucionario de las masas, cuya tendencia es hacia un gran enfrentamiento del pueblo contra sus enemigos representados en el Estado, en una gran Huelga Política de Masas en todo el país, manifiestan que se está atravesando por un período de ofensiva táctica dentro de la defensiva estratégica de la revolución. Por consiguiente, se ponen al orden del día las formas de organización y de lucha que corresponden a tal ofensiva: las huelgas económicas y políticas, las manifestaciones, bloqueos y combates callejeros que contribuyan a que el presente ascenso del movimiento avance lo más posible en la construcción de los instrumentos de la revolución y en la generalización de las formas de combate que faciliten el aprendizaje de las masas en la preparación de la Guerra Popular.
Teniendo en cuenta estas consideraciones, la XII Reunión Plenaria del Comité de Dirección de la Unión Obrera Comunista (mlm) decide Desplegar una Amplia Campaña Política Anti-electoral.
Tal campaña tiene por objetivos:
1. Elevar la conciencia de las masas frente al carácter del Estado:
“El Estado en Colombia es de carácter burgués, está en manos de la burguesía, los terratenientes y sus socios imperialistas, como máquina de opresión y dominación al servicio exclusivo de sus intereses de clase, y como arma de explotación de las clases oprimidas. Es un Estado burgués terrateniente y proimperialista, que durante toda su existencia ha utilizado la violencia reaccionaria para defender los intereses de clase de una minoría explotadora, ahogando en sangre todo grito de rebeldía de las masas trabajadoras”. (Programa Para la Revolución en Colombia).
2. Explicar el carácter mutilado de democracia burguesa y sus elecciones:
“La esencia de la democracia burguesa reside en el reconocimiento puramente formal de derechos y libertades, en realidad inaccesibles al proletariado y al semiproletariado por causa de la falta de recursos materiales, en tanto que la burguesía tiene todas las posibilidades de sacar partido de esos recursos materiales, de su prensa y de su organización, para engañar al pueblo. La libertad burguesa es la libertad de explotar y de oprimir a los trabajadores; libertad de reprimir la organización, la expresión, la movilización y la rebeldía de las masas trabajadoras.
“En el sistema parlamentario de la democracia burguesa, las organizaciones de las masas están completamente separadas del poder real y de la verdadera administración del país, pues la esencia del parlamentarismo burgués consiste en ‘decidir una vez cada cierto número de años qué miembros de la clase dominante han de oprimir y aplastar al pueblo en el Parlamento’”. (Programa Para la Revolución en Colombia).
3. Propagar la necesidad de destruir la vieja y podrida máquina de dominación de los explotadores:
“La tarea inmediata de la Revolución Socialista en Colombia, es destruir el poder político de la burguesía, los terratenientes y los imperialistas (…) Destruir con la violencia revolucionaria de las masas, el Estado opresor y explotador, destruirlo con todo su ejército –militar y paramilitar–, con toda su policía, con todo su aparato gubernamental de politiqueros y funcionarios, con todos sus jueces y carceleros, con todos sus curas, brujos y pastores”. (Programa Para la Revolución en Colombia).
Para sustituirla por el nuevo Estado de obreros y campesinos:
“La esencia de este nuevo tipo de Estado consiste en que la fuente del poder está en la iniciativa directa de las masas desde abajo; en la sustitución de la policía y el ejército –instituciones apartadas de las masas y contrapuestas a ellas–, por el armamento general del pueblo; en la sustitución de la burocracia por funcionarios elegidos y removibles por las masas, y remunerados con salarios de obrero. Es un aparato de dominación sobre los explotadores, ejercida por el pueblo en armas, cuya base organizada la constituyen las milicias obreras y campesinas, y el ejército de obreros y campesinos”. (Programa Para la Revolución en Colombia).
4. Contribuir a transformar la abstención electoral mayoritaria del pueblo en lucha consciente y revolucionaria contra el Estado:
En oposición a los partidos reformistas del oportunismo y la pequeña burguesía, y como parte de aislar su perniciosa influencia en el movimiento de masas, llamar a las masas a no apoyar con su voto la farsa electoral y la dictadura de los explotadores; denunciar el engaño de los promeseros, la trampa y la corrupción de la propia farsa electoral; insistir en la necesidad de persistir en la lucha directa y revolucionaria para enfrentar los planes de los enemigos y en la preparación y organización del Paro Nacional Indefinido.
Es una actitud que se corresponde con la debilidad del elemento consciente, el ascenso del movimiento espontáneo de las masas y la necesidad de aislar la influencia del oportunismo y la democracia pequeño burguesa en la dirección de las organizaciones de masas.
5. Elevar e intensificar la actividad política abierta y clandestina de las organizaciones comunistas en la perspectiva de forjarlas como verdaderas combatientes de vanguardia.
6. Establecer lazos de unidad y cooperación entre las organizaciones comunistas y revolucionarias al calor de la lucha y enfrentando a los enemigos comunes.
La Campaña Política Anti-electoral enarbolará las siguientes consignas:
¡Abajo el Podrido Estado Burgués y sus Elecciones!
¡Viva el Futuro Estado de Obreros y Campesinos!
¡NO VOTAR! ¡Ni el Estado ni los politiqueros, Solo el Pueblo Salva al Pueblo!
¡NO VOTAR, Unir y Generalizar la Lucha Obrera, Campesina y Popular!
¡Arriba, Arriba, Arriba la Lucha Popular!
¡Abajo, Abajo, Abajo la Farsa Electoral!
El Comité de Dirección encomienda al Comité Ejecutivo trazar el Plan Concreto de la Campaña de acuerdo con la presente decisión.
XII Reunión Plenaria del Comité de Dirección – XI Asamblea
Unión Obrera Comunista (mlm)
Agosto de 2019