Hoy 23 de enero, en el Día Mundial de la Libertad, compartimos con nuestros lectores el poemaPara la Libertad, del camarada Miguel Hernández; poema que refleja de manera profunda su compromiso político y lucha fehaciente contra el fascismo durante la Guerra Civil Española.
Hoy, cuando los imperialistas reorganizan sus fuerzas y amenazan con oprimir —por cualquiera de los frentes— el botón de la guerra de rapiña, las palabras de Hernández nos recuerdan el abnegado amor y sacrificio militante que caracteriza a los revolucionarios y a los comunistas.
Con este poema recordamos una vez más al poeta pastor, un campesino que —entre trincheras y fusiles, con periódicos y poesía— expresó su compromiso ferviente con la libertad y sacrificó por ésta su cuerpo y su vida.
Recordamos también, que el camarada nos legó una visión optimista del futuro, la esperanza de un nuevo amanecer, pese a los desafíos y sacrificios que nos exige el presente.
Para la Libertad
Para la libertad sangro, lucho, pervivo.
Para la libertad, mis ojos y mis manos,
como un árbol carnal, generoso y cautivo,
doy a los cirujanos.Para la libertad, siento más corazones
que arenas en mi pecho: dan espuma mis venas,
y entro en los hospitales, y entro en los algodones,
como en las azucenas.Para la libertad me desprendo a balazos
de los que han revolcado su estatua por el lodo.
Y me desprendo a golpes de mis pies, de mis brazos,
de mi casa, de todo.Porque donde unas cuencas vacías amanezcan,
ella pondrá dos piedras de futura mirada
y hará que nuevos brazos y nuevas piernas crezcan
en la carne talada.Retoñarán aladas de savia sin otoño,
reliquias de mi cuerpo que pierdo en cada herida.
Porque soy como el árbol talado, que retoño:
Porque aún tengo la vida.
