El nuevo cálculo del alcalde mafioso de Bello (municipio de Antioquia) es desalojar más de 190 familias humildes del barrio Girasol -sector los pinos- en plena pandemia. Todo bajo el supuesto de que son predios ilegales que ocupan propiedad privada del Hospital Mental de Antioquia. En la zona se agrupan sectores muy marginados de la región, en especial campesinos que huyeron de la guerra o el desempleo en el campo y habitantes que años atrás huyeron de la violencia mafiosa y paramilitar en las comunas y barrios populares en Medellín, hoy son desalojados de sus humildes viviendas y lanzados a la calle.
Se espera que se haga un operativo de varios días y hasta el momento la resistencia ha sido débil debido al elemento sorpresa de las fuerzas represivas. Los jóvenes alcanzaron a elaborar barricadas y pelearon lanzando piedras, pero la arremetida violenta e implacable del Esmad obligó a retroceder a los luchadores. En varias casas se levantaron banderas blancas en señal de asfixia por la gran cantidad de gas usado por los asesinos del Esmad. Es de esperarse que la resistencia se fortalezca con la ayuda de otros luchadores.
Hace 3 años la misma administración adelantó otro operativo de desalojo violento de varias familias del sector, pero para su sorpresa se enfrentaron con un barrio organizado y dirigido por varios revolucionarios que contaban con experiencia militar; gracias a ello, rápidamente se organizó la lucha con barricadas y tomas de puntos estratégicos para neutralizar el desalojo. Sorprendentemente lograron resistir por varios días pese al fuerte número de esbirros del Esmad, siendo finalmente derrotados mediante un ataque sorpresa nocturno.
En ese tiempo hizo falta una fuerte solidaridad del exterior y apoyo de varias organizaciones de masas y revolucionarias: Hoy en plena pandemia y en marcha hacia una gran Huelga Política de Masas, tal apoyo es necesario para frenar la arremetida del alcalde y defender la vida e integridad de los marginados habitantes de la Nueva Jerusalén.