Militares Pensionados en Huelga de Hambre

Militares Pensionados en Huelga de Hambre 1

¡Así paga el diablo a quien bien le sirve!

Las fuerzas armadas de Colombia son la columna vertebral del Estado de la moderna republica que administra el destino de toda la sociedad, siendo ellas, con el poder y terror de las armas, las grandes defensoras de la propiedad privada de los burgueses, terratenientes e imperialistas en el país. Tienen la tarea de mantener el orden capitalista e imponer los designios políticos y jurídicos que surgen de las demás instituciones del Estado, hacer que se cumplan y reprimir salvajemente toda expresión de rebeldía que surja a partir de la antipopular administración burguesa.

“Las Fuerzas Militares de Colombia son el conjunto de instituciones castrenses que se encargan de la defensa de la extensión territorial colombiana en cuanto a su parte aérea, terrestre y marítima que hacen parte de la República de Colombia; y están bajo el planeamiento y dirección estratégica del Comando General de las Fuerzas Militares de Colombia, cuyo comandante en Jefe es el Presidente de la República de Colombia; están conformadas por Ejército, Armada y Fuerza Aérea (…) Aunque constitucionalmente, a la Policía se le da un carácter de un cuerpo civil armado, en conjunto con la Policía Nacional, ahora hacen parte de la estructura general de la Fuerza Pública (…) a diferencia de la mayoría de países y por razones de orden público especialmente en las áreas rurales; la Policía Nacional posee una estructura de mando y grados así como una dotación de armamento de origen y uso mayoritariamente militar, y cuenta además con grandes unidades, que a su vez están entrenadas tanto en vigilancia e investigación civil como en el combate contra la guerrilla y otra clase de maniobras, así como cuenta con unidades aerotransportadas”. (Ver: Fuerzas militares de Colombia).

En el régimen narco-terrorista de Álvaro Uribe Vélez y por orden de éste y su otrora fiel perro guardián Juan Manuel Santos, Ministro de Defensa desde julio de 2006 hasta mayo de 2009, se desarrolló la Directiva 29 firmada por el anterior Ministro de Defensa Camilo Ospina Bernal, donde se incrementó en más de 150% los asesinatos, siendo más de 1000 jóvenes civiles presentados como “guerrilleros caídos en combates”.

Es así como esta institución ha asesinado a miles de luchadores honestos, a miles de obreros, estudiantes y campesinos pobres, quienes solo han reclamado mejores condiciones de vida para la sociedad. Para realizar tan repugnante labor, las FFAA reciben del Estado burgués y del imperialismo, sobre todo estadounidense, el mayor presupuesto en comparación al destinado a otras entidades gubernamentales, resultando ser la institución más costosa, la más burocrática y una de las más corruptas y asesinas. (Ver: Duque sube presupuesto militar yPresupuesto país en guerra).

Contrario a lo anterior, se pensaría que los miembros de las Fuerzas Armadas de Colombia están muy bien protegidos, sobre todo cuando son beneficiados con la pensión; sin embargo, luego de prestar sus servicios como militares activos durante más de diez años son dejados a la deriva sin mayores beneficios salariales y prestacionales, siendo tratados como todas las personas que alcanzan el requisito exigido para alcanzar la pensión, ya no sirven para los intereses de la burguesía y su costoso Estado y la entidad que los agremia, la burocrática Caja de Retiro de las Fuerzas Militares, hace poco o nada en la defensa de estos pensionados, con argumentos tontos y mentirosos les da la espalda a la hora de pedir aclaraciones por parte de miles de hombres quienes se ven obligados a mendigar la atención en salud, el aumento de sus pensiones y demás beneficios de ley que les corresponde.

Es por esta misma situación que desde el martes 21 de mayo, 7 hombres pensionados de las Fuerzas Armadas, han iniciado de forma indefinida una huelga de hambre en la plaza de Bolívar de Bogotá. Estos hombres piden la presencia del títere presidente Iván Duque para que les resuelva directamente sus necesidades.

De esta manera muy claro se ve como ¡el diablo le paga a quien bien le sirve! … Son los héroes de la patria, decía una señora que hace parte de CODES Veeduría Ciudadana, hay que ayudarlos y difundir por redes sociales esta problemática; otro militar pensionado dijo de manera enfática e indignada quearriesgaron sus vidas por muchos años en la defensa del país y que hoy el gobierno los tiene en el abandono, sobre todo en el tema de salud para ellos y sus familias, que aún no les reconocen algunos derechos en materia salarial y pensional, que el gobierno los traicionó y no les cumplió con las promesas hechas, luego de comprometerse en la campaña presidencial de Iván Duque, otro militar dijo que muchos votamos por él y por el Centro Democrático y ahora nos dejan a un lado.

Según dijo Luis Fernando Henríquez, sargento retirado de la Policía Nacional: “Hay una mala administración del sistema de salud al interior de la fuerza pública (…) La corrupción lo ha permeado y estamos solicitando un salvavidas para que se nos garantice el derecho a la salud (…) cuando vamos a pedir una cita médica no la tenemos y mucho menos una cirugía o medicamentos de alto costo, y los generales guardan silencio”. (Ver: Pensionados de las fuerzas militares entran en huelga de hambre).

Dice que no quieren escucharlos, que ellos no son tira piedra, ni bloquean vías, que están desarrollando la protesta de manera pacífica, pero que además hay muchos militares activos que no dicen nada por miedo a ser castigados por sus superiores, complementó lo dicho antes por uno de sus compañeros… “en época electoral realicé una caminata desde Pasto hasta Bogotá apoyando la campaña presidencial de Iván Duque y me reuní con él para entregarle una bandera de manera simbólica, pero luego de la posesión, el primer mandatario prácticamente nos olvidó”.

La burguesía trata por igual a todos, no le importa la sociedad más que para exprimir al máximo sus fuerzas, lucrándose de todo lo generado por el trabajo de los millones de explotados y oprimidos, entre estos, los niveles inferiores y medios de las Fuerzas Armadas, que la protegen y defienden su propiedad privada.

La burguesía, en la carrera desenfrenada por controlar todo para su pleno gozo y disfrute, se lleva por delante las vidas de millones de seres humanos e incluso la naturaleza misma, cada día mata miles de hombres y mujeres en la inmunda moledora carnicería humana de la guerra imperialista injusta que promueve en todo el planeta. Irak, Afganistán, Siria, Libia, en los países de la antigua Unión Soviética, en Centro América, en Chile y Argentina y pronto en Venezuela, son una ligera muestra en donde el imperialismo con su anacrónica burguesía ha metido sus garras y ha desangrado durante muchos años estos países; en Colombia donde nunca ha parado, ha invertido miles y miles de millones dólares para mantener las riquezas bajo su dominio mediante la supuesta lucha contrainsurgente en otras décadas, hoy bajo la supuesta lucha contra las drogas y el terrorismo.

Somos una sociedad dividida en dos clases irreconciliables y enemigas a muerte, todo lo que existe en esta sociedad pertenece a una de estas clases, las Fuerzas Armadas están compuestas por hombres y mujeres mayoritariamente proletarios y campesinos pobres, explotados y oprimidos durante cientos de años; familias enteras de obreros y campesinos tienen sus hijos como soldados del ejército burgués, lamentablemente sirven a esa depravada clase explotadora, defendiéndola con las armas y con sus vidas, ellos mueren convencidos de haber aportado a la PATRIA sus esfuerzos y energías defendiéndola de los terroristas.

Sin embargo, lo que deben tener claro es que defienden a la clase que explota a sus propias familias y a ellos mismos, la burguesía, los terratenientes y los imperialistas, quienes les imponen una vida miserable y servil, los engañan con mejores condiciones materiales y les prometen, con la cruz de la iglesia una vida mejor.

Haciendo parte de las filas revolucionarias del pueblo es donde construirán una vida mejor, poniendo al servicio de las masas en general las armas que han de liberar al país y al mundo entero del maldito y oprobioso sistema capitalista imperialista y han de contribuir a realizar la gran obra de los camaradas Marx, Engels, Lenin, Stalin, Mao y muchos otros grandes luchadores, el socialismo y el comunismo.

La pensión, como los demás derechos del pueblo, no se mendiga, se conquista al calor de la lucha revolucionaria.

Un camarada

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