A propósito de la huelga en Seatech Internacional Inc (antes atunes de Colombia), donde decenas de valerosas y combativas mujeres han liderado una toma para impedir el despido masivo de 1.800 trabajadores, el Estado burgués aparece vinculado a este conflicto, de diferentes maneras.
Desde el mismo Ministerio de trabajo, se sancionó a este monopolio, y a la temporal ATiempo Servicios SAS, por mantener la vinculación «tercerizada» de los trabajadores. Dicha sanción impuesta con la resolución 311 del 27 de julio de 20151, es ahora negada por parte de la empresa y a la fecha, en lugar de asumirla y corregir de inmediato, Seatech Internacional Inc, ¡planteó una «parada técnica» para despedir masivamente a los trabajadores, con la promesa de recontratarlos en este mes de noviembre!
Con descaro Seatech Internacional, además de incumplir con la sanción la desmiente como lo hizo a través de un oficio enviado a RCN:
«Acudimos a la opinión pública en defensa de las informaciones descontextualizadas y distorsionadas que se vienen replicando en algunos medios de comunicación, que de manera poco cuidadosa hacen eco a informaciones malintencionadas que tienen como fuente un grupo minoritario de trabajadores que pertenecen a la organización sindical Ustrial y cuyas reclamaciones, además de carecer de fundamento jurídico…»
¡Que confianza la de los explotadores! Son capaces hasta de negar lo que la ley «les obliga a cumplir», con cuánta razón las masas populares afirman que la justicia es para los de ruana.
Ante todos estos atropellos los trabajadores responden con lucha, y por ello ¡son además maltratados, reprimidos y golpeados! Por parte del Esmad. ¡Qué gran democracia, la que ofrecen a los capitalistas!, mientras el hipócrita Estado con una mano los «sanciona», con la otra los defiende y representa a través de las fuerzas represivas; mientras es blando con el cumplimiento de sanciones para favorecer a los trabajadores, es firme y certero para golpear a la clase obrera, cuando se atreve a desafiar el orden burgués.
Luego de varios días de lucha, donde la toma por parte de decenas de mujeres cabeza de familia fue lo más significativo; luego del enfrentamiento con los asesinos de Esmad; luego de soportar el trato militar a un conflicto laboral, que debería ayudar a resolver el Ministerio de Trabajo (pues se supone que es para eso); luego de no poder ver a sus familias por varios días; luego de recibir garrote y aparato de guerra en lugar de soluciones, los trabajadores de este monopolio atunero, lograron pactar en una reunión, la no retaliación contra los luchadores el pasado 10 de noviembre.
Con presencia de algunos representantes de Seatech y Atiempo, de los sindicatos Ustrial, Sinaltrainal y Sintramar y representantes de la CTC y la CUT, la federación de Pensionados y el Ministerio del Trabajo
«…las empresas se comprometieron a no despedir a ningún trabajador afiliado a los sindicatos, a respetar la estabilidad laboral reforzada y además a que no habría ninguna discriminación, entre los afiliados a los sindicatos. Es necesario aclarar que la empresa a través de los jefes salió a decir que nuestros afiliados hicieron daños en las instalaciones de Seatech. Cosa TOTALMENTE FALSA. Como lo podemos probar con testigos, videos y con la negativa de la empresa al no dejar ingresar a un funcionario del Ministerio del Trabajo y a otro de la Defensoría del Pueblo.
No pasó un día de la reunión y la empresa Atiempo Servicios comenzó a discriminar a nuestros afiliados al negarles la atención en la «firma» de los «contratos» y el martes 17 le negó la entrada a la planta a más de 120 trabajadores aplicándolos el Art. 140 del Código Sustantivo del Trabajo que quiere decir que les pagaran los salarios sin que los trabajadores presten el servicio.»2
Entonces, los trabajadores ¡salen a deber al patrón! En el país de la paz, el Estado no es capaz de intervenir cuando atropellan a los obreros, no aparece la Procuraduría, ni la Contraloría, ni todas sus inservibles instituciones; pero cuando se trata de defender a los explotadores, llegan en cuadrilla, con tanqueta, escopetas truflay, gases y bolillo. Por ello, obreros y campesinos deben organizar mejor su lucha, para resistir la embestida antiobrera y antipopular del Estado burgués, benefactor de los explotadores.
Es necesario además, aclarar el papel del Estado burgués, el cual no ceja en su objetivo de mantener el paraíso de la explotación asalariada. Por ello, sus hipócritas sanciones a los patronos no serán cumplidas y sus feroces medidas contra los trabajadores serán aplicadas con rigor (como el proyecto de ley contra la estabilidad reforzada). Con ese propósito, son capaces hasta promover las más cruentas guerras y de pisotear a todo aquel que levante la cabeza, como magistralmente lo viene haciendo el movimiento de masas en Colombia y en el mundo.
La lucha en Seatech Internacional Inc, es una demostración más de que se puede luchar por mejores condiciones de trabajo, por contratación directa y por alza de salarios; es un ejemplo de lo que es capaz de hacer la clase obrera por defender sus derechos. Ni el garrote, ni los engaños, ni la represión, pueden detener la lucha del movimiento obrero, atizada por el antagonismo de las contradicciones en este sistema; como tampoco podrán detener el avance hacia los cambios definitivos que necesita la sociedad colombina, para los cuales ya están las condiciones objetivas y solo se requiere de las subjetivas, que consisten en la dirección consciente y organizada de la vanguardia de la clase obrera, única capaz de encausar la rebelión de los oprimidos y explotados hacia la revolución socialista.